La superviviente de Garrido sigue con una bala en la cabeza: «Solo recuerdo que no quería tomar nada»

A las 9.35 horas ha sido llamada a la sala y se ha sentado a espaldas del biombo que protegía su identidad del público, pero sí a la vista de jurado, fiscal, abogados y, parcialmente, el autor de los disparos. Belén resultó herida de gravedad y sufrió importantes lesiones en la mandíbula que obligaron a operarla en varias ocasiones: estuvo 40 días ingresada.

«Me queda operar de la cara, no tengo hueso», ha comentado la víctima, que ha confirmado que no ha podido volver a trabajar porque le falta un dedo de una mano donde tiene importantes heridas. Tampoco puede cuidar de su hijo, con discapacidad, del que dice tampoco recuerda el nombre, y eso es «lo que más me duele». Su vida ha cambiado mucho: también tiene que vivir con sus padres y sigue de baja. Sigue teniendo una bala en la cabeza que no le ha sido extraída y le falta un hueso de la mandíbula. «Me acuerdo de las cosas, pero no soy capaz de sacarlas por la boca», ha dicho.

En su habla se aprecia la dificultad para pronunciar palabras. «No me acuerdo de nada de aquel día, sé que estuve con los días, sólo me acuerdo de que no quería tomar nada», ha asegurado la víctima que sí afirma recordar que era su cumpleaños «y supongo que lo estaríamos celebrando». «Ahí es donde le dije que no quería tomar nada», ha dicho cuando le han preguntado por el bar Ciclón, que es donde se produjo la discusión. «Ahí es donde le dije que no quería tomar nada», ha reiterado, algo que le dijo al dueño del establecimiento. «Es lo único que me acuerdo, lo tengo aquí», dice.

Ha insistido en que no recuerda buena parte de lo ocurrido, pero sí que la persona que insistió en invitarles era «alto». «No tengo ni idea de cuándo nos fuimos, no recuerdo nada», ha insistido.

Después le ha llegado el turno a la amiga con la que José María y Belén celebraban el cumpleaños de esta, Natalia. Ha reconocido al encausado, como ya hizo en una rueda de reconocimiento en su día, ha refrendado que les ofreció una copa de manera insistente «sólo a las mujeres» y que tenía un interés especial en Belén.

No recuerda si el presunto asesino estaba muy bebido ni prestó atención a lo que pedía. En su turno, el abogado de la defensa le ha preguntado por el vídeo de cámaras de seguridad de un taller en el que se les veía, en concreto, si no apreciaba que el acusado iba tambaleándose; en ese punto, la jueza ha interrumpido al abogado defensor y le ha insistido que la testigo solo estaba allí para contestar lo que había visto, no para hacer conjeturas.

Después ha declarado José Luis, dueño de un local donde estuvieron los tres amigos y que después estuvo en el bar Ciclón. Ha ratificado que vio al acusado salir tras ellos cuando se marcharon ya de madrugada. Y ha negado, desde experiencia de más de 20 años en hostelería, que estuviera especialmente bebido.

El siguiente testigo ha sido Juan, dueño del bar Ciclón, es amigo de Belén y recordaba también al acusado porque acudía de vez en cuando a su local, «lo conocía de vista». Esa noche venía con una cerveza, Estrella Galicia, de otro local cercano y se sentó en la terraza, primero al lado y luego en la mesa de los tres amigos. Ha asegurado que le dijo que «le gustaba una» de las mujeres que había fuera. Recuerda que el acusado se encaró con uno de los camareros, que le pidió «pórtate bien» y al que respondió «tu no me conoces». «Él no te conoce, pero yo sí», dice el hostelero que terció.

«Es el que ha ido detrás de ellos», recuerda que le dijo un hostelero de otro bar cuando se conoció lo ocurrido y tras escucharse las detonaciones. Llamó a Belén por teléfono pero ella no contestó. «Bebió bastante», ha recordado también sobre el estado del acusado.

Después ha intervenido uno de los camareros, Cristian, que conocía a Belén y de vista a los dos amigos con los que estaba el día de los hechos, igual que el presunto autor de los disparos al que vio dentro del establecimiento, como cliente frecuente, ya que él atendía más a los clientes en interior. «A lo mejor sí que había bebido un poco, pedía cerveza, venía de otro bar», ha comentado, pero no le pareció que estuviera especialmente borracho, «de haber bebido tres o cuatro cervezas, pero no iba del todo mal».