La cifra de multas por orinar en plena calle en Salamanca se ha reducido de forma ostensible durante 2024, el primer año en el que, a partir de junio, se incrementó la multa de 300 a 500 euros a quienes fueran sorprendidos en esta actitud. Una mejora que supone una reducción de casos a la mitad con respecto a los de 2022, pero que todavía obliga a soportar la suciedad y edores en muchos puntos de la ciudad, especialmente zonas de ocio y fines de semana.
Publicidad
El número de expedientes por infracciones a las ordenanzas que velan por la limpieza y la convivencia en la ciudad de Salamanca se han reducido durante el año pasado en una evolución que apunta a un dato concreto: se han puesto muchas menos multas por orinar en la calle. El motivo, que ahora sale mucho más caro. En junio, se decidió subir de 300 a 500 euros la multa y se ha notado.
Noticia relacionada
Así se pone de manifiesto en los datos que el ayuntamiento maneja sobre las multas de Policía Local por ensuciar la calle, arrojar objetos, deyecciones de animales o escupir y orinar en la vía pública. Desde el consistorio entienden que las cifras han bajado porque haber elevado la multa ha tenido un carácter disuasorio importante. No obstante, es imposible vigilar todas las esquinas, que es la clave de la reducción, y siguen siendo muchas multas.
Según los datos, se ha pasado de 855 por orinar en la calle a 640 expedientes por el mismo motivo, que es una de las infracciones clave a la ordenanza de limpieza de la ciudad. La cifra se ha reducido de forma exponencial, ya que en 2022 un total de 1.317 personas fueron expedientadas por este motivo en el primer año de 'libertad' tras la pandemia, en lo que es el récord absoluto. Aquel 2022, después de años de muchas sanciones, se decidió aumentar el control y el fruto de ese mayor celo sancionador fueron las 1.300 multas; se esperaba que la mayor vigilancia se tradujera en una reducción de infracciones registradas.
En 2023 la cifra se rebajó a las 855 contando las de toda la ciudad y las específicas de hacerlo en la Plaza Mayor. El consistorio consideró entonces que la rebaja no tenía que ver con una menor vigilancia, sino con una mayor concienciación.
Publicidad
Sin embargo, las infracciones por este motivo son constantes y se repiten, especialmente los fines de semana y en zonas de ocio nocturno. Da igual hombres que mujeres, cada semana la comisión de Medio Ambiente resuelve unas cuantas. Desde el primer día del pasado año ya hubo expedientes por este motivo.
Este año pasado, en junio, se decidió incrementar la multa para darle otra vuelta de tuerca a la disuasión, pero pronto hubo quienes estrenaron la nueva tarifa. La primera tuvo lugar una noche de jueves a viernes, la primera en la que se aplicaba la nueva multa de 500 euros. Fue en pleno centro, en la plaza del Poeta Iglesias, y por orinar en la estatua de Churriguera. Y al mes se habían puesto 14 multas, media docena en una misma noche.
Publicidad
Sin embargo, la medida ha surtido efecto. Las primeras cifras estaban por debajo de lo habitual. El número de expedientes sigue siendo alto, pero es cierto que el ritmo de denuncias se ha reducido. En 2024 fueron 627 en toda la ciudad y otras 13 en la propio Plaza Mayor, donde aumentan (ocho en 2023) y llegaron a ser 15 hace unos años.
Cualitativamente, el problema sigue estando ahí y muy localizado en las noches de fiesta y el centro, donde más se vigila, en calles como Varillas o Gran Vía. Entre los objetivos de los más incívicos, la tapia de un convento, el de la Anunciación o las Úrsulas, fundado hace 500 años y donde fueron sorprendidas dos personas haciendo sus necesidades la noche del 6 de junio.
Publicidad
También es centro habitual de micciones la Plaza Mayor, donde cada año se registra un ramillete de infracciones a pesar de la presencia casi permanente de la Policía Local. De hecho, ya se ha pillado allí a gente que orina sin percatarse de la vigilancia.
La multa por orinar en la vía pública puede llegar por dos vías en función de donde se cometa la infracción. Si es en la calle, se aplica la ordenanza municipal de limpieza que recoge multas por hacer las necesidades en la calle. Si es en la Plaza Mayor, se les multa en virtud de la ordenanza de uso del lugar que, como monumento protegido, tiene su propia normativa y también contempla sanciones por estos comportamientos, aunque la cuantía es idéntica.
Disfruta de acceso ilimitado y ventajas exclusivas
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Cinco trucos para ahorrar en el supermercado
El Diario Vasco
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.