La multa por música alta en la Plaza Mayor de Salamanca que sienta un precedente

Félix Oliva

Salamanca

Jueves, 10 de abril 2025, 10:34

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La música por encima de 100 decibelios le va a costar al Fin de Año Universitario una multa de 600 euros, una sanción que sienta un precedente en torno al impacto que sufre la Plaza Mayor por el volumen de los conciertos, no medido, pero que genera controversia desde hace años. La cuantía corresponde con la propuesta de sanción tras el expediente abierto en su día al medir la Policía Local la música por encima de lo permitido.

Según explican fuentes municipales, la sanción se va a imponer por incumplimiento a la ordenanza de convivencia ciudadana, una de las que marca límites a las emisiones de ruido, lo que es un matiz importante ya que el ayuntamiento ha optado por aplicar una normativa municipal y no la ley del ruido. La multa podía ser de hasta 750 euros por una infracción que se considera leve en la ordenaza de convivencia.

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En caso de haberse aplicado la ordenanza contra ruidos y vibraciones, la multa por infracción leve sería también de hasta 750 euros, pero se elevaría a 3.000 en caso de considerarse grave.

Los hechos se remontan al pasado día 12 de diciembre de 2024, la fecha de la antes conocida como nochevieja universitaria. Ese día, se produjo un pico de más de 102 decibelios y varias mediciones por encima del límite fijado, de 90 decibelios, superaban incluso el margen que se había dado de cinco decibelios más.

Tras las mediciones por parte de la Policía Local, responsables de la entidad organizadora, que corresponde a la Asociación de Empresarios de Hostelería de Salamanca, se personaron en el lugar, y a pesar de que el episodio de música atronadora no se prolongó más allá de los 20 minutos, se procedió a bajarla cuando así se requirió.

La consecuencia fue la apertura de un expediente que se ha estado instruyendo desde entonces para documentar lo sucedido y que desde el consistorio asumían que tenía que acabar en propuesta de sanción, algo que se da por hecho, pero sería el instructor el que decidiera. La mayor complicación ha sido contar con mediciones válidas en las que no influyera el ruido ambiente y se pudiera aislar el volumen real de la música de las actuaciones, certificando que se superaron los límites.

Así lo entendía el propio alcalde en la entrevista publicada por Salamancahoy. «No sería fácil de entender que no la hubiera. Lógicamente, si se ha infringido una normativa habrá que actuar para que esas conductas no se vuelvan a producir», aseguraba al preguntarle sobre qué ocurriría si no hubiera multa.

El caso es que el exceso fue notorio, será multado y sancionarlo supone un precedente importante. Es la primera vez que superar el límite establecido para el volumen de la música en las actuaciones de la Plaza Mayor acaba en multa.

La celebración no contaba en esta ocasión de un tratamiento diferencial. Desde el consistorio explican que para los conciertos en Ferias y Fiestas están suspendidas las normas del ruido, y el año pasado en la nochevieja universitaria también se solicitó, pero este año no. Se había pactado un límite de 90-95 decibelios con la organización