Olona advierte a Vox de que no podrá gobernar si es «excluyente»

Olona lanzaba ese dardo a la que fue su formación tras superar de forma exitosa el segundo boicot consecutivo al que se enfrentaba por parte de organizaciones de izquierda y estudiantiles en pocos días. Primero fue en Granada, el 15 de septiembre. Y ayer, en Murcia. Pero a diferencia de lo que se vivió en la ciudad andaluza –donde Olona sufrió un escrache con momentos de alta tensión–, ayer no se produjeron altercados a pesar de la presencia de decenas de manifestantes. La Policía Nacional tuvo que escoltar, eso sí, a la exrepresentante de Vox hasta las puertas de la universidad pública.

Antes de la conferencia, Olona aseguró ante los medios de comunicación que las últimas y vertiginosas 48 horas –en las que Vox le ha cerrado oficialmente las puertas tras las acusaciones de la exdiputada sobre la falta de «democracia interna»– le han hecho «quitarse una losa de encima». Ahora, sostiene, ya todos saben que no fue su voluntad marcharse del partido y que puede hablar con más claridad.

Por ello también aprovechó para marcar un horizonte temporal de cara a efectuar próximos movimientos: las elecciones municipales y autonómicas de mayo del próximo año. Si Vox flaquea y da muestras de no poder erigirse en una alternativa real de Gobierno junto al PP para desbancar a Pedro Sánchez, no descarta poner en marcha una nueva plataforma. Algo que hoy aparca porque cree que fragmentaría el voto. La excandidata a la Junta de Andalucía señaló que se trata de algo que ya le han pedido muchos afiliados de Vox. Al igual que otros desde fuera.

No obstante, la abogada del Estado no tiene previsto desaparecer del escenario mediático. Este mismo lunes participará en Sevilla en otro encuentro con Mario Conde. Será la segunda ocasión en la que Olona se deja ver con el expresidente de Banesto en pocos días, avivando la posibilidad de embarcarse juntos en un eventual proyecto político