miguel pérez
Sábado, 30 de julio 2022, 13:11
«A mi edad y con esta limitación tengo que ahorrar fuerzas para poder servir a la Iglesia» o, «al contrario, pensar en la posibilidad de echarme a un lado». Con estas palabras, el Papa Francisco dejaba este sábado «la puerta abierta» a una posible ... renuncia por problemas de salud, que de momento no tiene prevista pero que tampoco sería una «catástrofe», según explicó a los periodistas en una rueda de prensa celebrada en el avión que le llevaba de regreso al Vaticano tras una intensa gira canadiense donde ha pedido perdón por «el mal que tantos cristianos hicieron a los indígenas» durante la colonización.
Publicidad
Fiel a su carácter, el pontífice, de 85 años, abordó con naturalidad los rumores insistentes sobre una posible dimisión de su cargo debido a las limitaciones físicas, especialmente en una rodilla, que lastran su salud y le obligan a recurrir cada vez más a una silla de ruedas. De hecho, Francisco I dio la rueda de prensa sentado, un gesto inusual en él, y durante sus seis días en Canadá se desplazó de forma rutinaria en una de estas sillas para no empeorar su lesión en la pierna. Este sábado reconoció incluso que deberá reducir sus visitas a otros países con un esclarecedor «no creo que pueda seguir a este ritmo». Aun así, intentará continuar con el máximo de desplazamientos posible «porque es una manera de estar cerca de la gente y un modo de servir».
Las señales de cansancio han sido visibles en su periplo canadiense, posiblemente uno de los más complejos de su pontificado tanto por el contexto como por lo inabarcable de su kilometraje. Bergoglio, acostumbrado a romper con autoridad crítica el manto de silencio de la Iglesia respecto a sus propias actitudes en asuntos como la pederastia, la homosexualidad o la marginación de las mujeres, cruzó el Atlántico por invitación de los pueblos originarios para disculparse por el papel de la institución católica en el proceso de 'asimilación' de los niños indígenas durante la colonización canadiense. Se calcula que 15.000 menores fueron separados de sus familias y muchos terminaron en internados de la Iglesia donde les obligaron a olvidar su cultura natal. Al menos 4.000 murieron a causa de malos tratos, enfermedades y desnutrición. El horror y la brutalidad se ocultaron en fosas comunes clandestinas.
Noticia Relacionada
Francisco se ha reunido por primera vez con supervivientes y allegados de quienes murieron en aquellos sórdidos lugares. En esta «peregrinación penitencial», ha tenido que escuchar críticas duras, pero también agradecimientos. Lo de peregrinación es un concepto bien traído. Después de Edmonton y Québec, el pontífice acabó la visita el viernes en Alaska, donde se reunió con la comunidad inuit en Iqaluit, una pequeña población de 7.000 habitantes con un clima extremo y a la que solo se llega en avioneta. De allí fueron arrancados de sus casas centenares de niños. «Quiero pedirles perdón por el mal perpetrado por no pocos católicos», pidió a los supervivientes.
Del carácter agotador del viaje, jalonado por actos multitudinarios y reuniones institucionales como la del primer ministro Justin Trudeau, ofrece un buen testimonio que el Papa lo iniciara apoyado en un bastón y este sábado regresara al Vaticano en una silla de ruedas. Algunos medios especulan que el intenso programa le ha pasado factura a su dolencia de rodilla. Confesó a los 78 periodistas que le acompañaban en el avión que no piensa operarse debido a los riesgos que entraña la anestesia en su caso. Un peligro que ya se hizo patente en la intervención de colón a que fue sometido hace un año.
Publicidad
El pontífice argentino matizó, en cualquier caso, que todavía no ha pensado en la posibilidad de una renuncia, pero adelantó que tampoco sería «una catástrofe. Honestamente, no es una catástrofe. Se puede cambiar de Papa. No es un problema», explicó en la primera ocasión en que se pronuncia abiertamente sobre esta cuestión tras haber desmentido en varias ocasiones los rumores de una renuncia inminente. De hecho, ha dejado claro que sólo lo contempla como una opción de futuro si sus limitaciones de salud empeoran. «No he sentido aún esta posibilidad, pero esto no quiere decir que mañana no empiece a pensar en ello», avisó.
Tampoco sería el primer máximo dignatario de la Iglesia que da este paso, ya que Benedicto XVI dimitió en febrero de 2013 también por motivos de salud. Con su habitual humor, Francisco I se reafirmó en que él es un Papa jesuita y subrayó que obedece la «voluntad del Señor. Y si el Señor te indica que vayas al rincón, pues vas al rincón».
Publicidad
El paso más inmediato del Vaticano ahora consiste en ajustar la agenda de viajes de su principal rector. Bergoglio adelantó que asistirá a la cumbre de religiones de Eslovaquia el 14 y 15 de septiembre por su carácter de «viaje tranquilo» y confió en visitar África el próximo año. Tiene pendiente un desplazamiento a Ucrania. El Papa «quiere ir», pero en este caso entran en juego otros factores organizativos y de seguridad.
Si hay algo que caracteriza al pontificado de Francisco es que es una fuente inagotable de titulares, con declaraciones sobre muchas cuestiones sobre las que sus antecesores pasaban de soslayo.
Así, sobre la homosexualidad en 2013 dijo que «si una persona es gay, busca a Dios y tiene buena voluntad, ¿quién soy yo para juzgarlo?». Francisco diría después que «las uniones de hecho o del mismo sexo, por ejemplo, simplemente no pueden ser equiparadas con el matrimonio».
En otras declaraciones que levantaron polvareda, en 2016, se mostró partidario de «aumentar el número de mujeres en posiciones de toma de decisiones en la Iglesia». Pero después tuvo que añadir que no iba a haber mujeres sacerdotes: «La última palabra clara en cuanto a esto la tuvo Juan Pablo II». También causaron revuelo sus afirmaciones de que la salvación está al alcance de todo el mundo: «El Señor nos ha redimido a todos nosotros con la sangre de Cristo: todos nosotros, no solo los católicos».
Disfruta de acceso ilimitado y ventajas exclusivas
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.