Los pueblos de Salamanca que triunfan en redes sociales vendiendo fincas, negocios y casas

Decenas de bares, empresas y comercios que iban a cerrar se han salvado gracias a una plataforma de reciente creación que ahora ha puesto su punto de mira en otro gran problema, el de la vivienda. La solución, un banco digital donde anunciar todo tipo de negocios, pero también casas, fincas y naves, y centrado en una de las zonas más envejecidas y despobladas de Salamanca. Y que contra todo pronóstico, ha triunfado: uno de cada tres anuncios ha acabado en venta.

Las redes sociales se están convirtiendo en el aliado más inesperado de los municipios de Salamanca y una comarca muy concreta, la Sierra de Francia, se está posicionando a la cabeza del uso del entorno digital para no sucumbir a la globalización, la despoblación, el envejecimiento y el cambio climático, los principales enemigos que colocan a muchas zonas de la provincia entre las más desfavorecidas del país.

La plataforma Negocio Rural se ha convertido en uno de los éxitos de este 2024 y, cuando está a punto de cumplir su primer año de funcionamiento, no sólo ha dado un gran resultado que pocos esperaban. Su funcionamiento es sencillo. Los anuncios se publican en sus cuentas en las redes sociales Facebook e Instagram, las 'ventanas' digitales en las que los interesados pueden consultar e informarse. El servicio es gratuito y la plataforma se limita a poner en contacto a anunciantes y posibles compradores.

Tras su estreno en enero de 2024, cuelga el cartel virtual de 'Vendido' a una actividad cada semanas. Cuenta con 3.500 seguidores, y en abril había alcanzado más de 50.000 visualizaciones y 38.000 interacciones. En total, según cifras de sus impulsores, se han vendido 60 negocios en lo que va de año, desde bares a comercios o explotaciones agrarias y ganaderas.

Eso supone que uno de cada tres anuncios colgados en sus redes sociales o en las ferias presenciales que ha celebrado ha acabado con venta o alquiler y ha logrado su objetivo: un relevo generacional, con cambio de manos, para evitar que se pierdan servicios.

El resultado ha sorprendido a propios y extraños. Sus impulsores, la agrupación de desarrollo rural de la Sierra de Francia, Adriss, empezaron con una estimación de poder colocar un 15%, aunque entre quienes no conocían la idea los pronósticos eran más funestos: «Si vendéis alguno, ya estará bien». Así se lo recuerda Ángel Poveda, uno de los impulsores de Negocio Rural y del proyecto Revitalizar 2.0, que abandera Adriss.

La idea ha tenido una gran acogida y, tras el éxito de Negocio Rural, han recibido ofertas para trasladar la idea a otras provincias. Pero, por ahora, lo que ya está en marcha es el banco de viviendas y fincas.

La falta de vivienda adecuada es uno de los mayores desafíos que enfrentan las comunidades rurales hoy en día, ya que es difícil encontrar vivienda y muchos inmuebles quedan vacíos al fallecer o marcharse sus dueños. Esta despoblación afecta también a las fincas rústicas y a los negocios que por falta de relevo generacional se ven abocados al cierre.

En las últimas semanas se ha puesto a funcionar con un sistema similar al de los negocios. Los anuncios se publican en las redes sociales del proyecto y los interesados pueden contactar con los vendedores o solicitar información.

Desde el proyecto explican que encontrar vivienda en zonas como la Sierra de Francia es difícil porque no hay anuncios por los canales habituales y, aparentemente, la oferta es mínima cuando ocurre todo lo contrario. Según los impulsores de la idea, hay cerca de 5.000 inmuebles disponibles en estos municipios entre viviendas, fincas, naves o tierras.

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