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La petición de UPL para revertir la autorización concedida a la Denominación de Origen Rueda de usar la variedad bruñal, autóctona de los Arribes del Duero, ha sido desestimada por la Junta de Castilla y León. El gobierno regional mantiene su decisión a pesar de que la Unión del Pueblo Leonés (UPL) considera, y así lo expreso en las Cortes, que va «contra los intereses de Zamora y Salamanca, amenazando al sector vinícola de Arribes» y es «competencia deseal».
En la cámara, UPL ha apuntado que la variedad de uva bruñal no es autóctona del área que conforma la DO Rueda y sí de la DO Arribes, donde se emplea en la producción de vino por detrás de la más cultivada, la Juan García. El partido leonesista señala que la variedad de uva bruñal es muy apreciada por los viticultores de Arribes de Salamanca y Zamora porque «aporta mucho color y grado a los vinos», una cualidad que creen que puede estar detrás del interés de la DO Rueda «para pretender hacer vinos con la variedad de uva bruñal pese a no ser propia de su área».
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La petición de UPL no ha hecho cambiar de parecer al gobierno regional. La Junta se ha reafirmado en que la DO Rueda pueda emplear la uva bruñal en sus vinos. La Consejera de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, María González, ha respondido en Cortes que la autorización dada «es consecuencia de la tramitación del procedimiento», aunque no entra a valorar las características de la uva ni de dónde es autóctona.
Los regionalistas leoneses han lamentado que el uso de uva bruñal por parte de la DO Rueda, al no ser autóctona de la misma, podría considerarse «competencia desleal hacia la DO Arribes», considerando que los viticultores arribeños «son los grandes perjudicados por dicha decisión de la Junta, que una vez más antepone los intereses castellanos sobre los leoneses». Crítica que fundamentan porque entienden que «no resulta razonable si tenemos en cuenta que en el área de la DO Rueda nunca se ha utilizado la uva bruñal y que parece responder única y exclusivamente a querer beneficiarse de la valoración que poseen los vinos que emplean este tipo de uva, gracias al buen trabajo realizado por los viticultores de Las Arribes». Antes esta última afirmación la Consejera ha respondido un escuto: «la respuesta es no».
UPL ha reprochado que no se haya tenido en cuenta a los viticultores de Arribes ni a su Consejo Regulador antes de tomar la decisión, a lo que la Consejera respondía que «mantiene un contacto fluido con todo el sector agrario» y limitándose a apuntar que para la autorización dada a la DO Rueda para usar uva bruñal en sus vinos desde la Junta «se han seguido los trámites establecidos en la normativa aplicable».
Por todo ello, desde UPL creen la autorización dada por la Junta a la DO Rueda de emplear uva bruñal supone «un ataque evidente a la agricultura y la economía zamorana y salmantina», y han recordado a la Junta, en las preguntas planteadas en las Cortes, lo apuntado previamente por la Vicepresidenta del Consejo Regulador de Arribes en un medio de prensa zamorano de que «para nosotros, la clave de la supervivencia son las variedades minoritarias», indicando asimismo que «si otras denominaciones de origen con más capacidades económicas adquieren estas variedades como propias, lo que ocurre es que se limita la posibilidad de que haya trazabilidad para determinar de dónde son».
UPL, tras criticar que no se dé marcha atrás, argumenta que la Junta «no está teniendo en cuenta que es un tipo de uva que nunca se ha empleado en esa zona (Rueda), y que podría perjudicar al mercado de los vinos de la DO Arribes, donde sí es autóctona».
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