Accidente en una foto: el dragón de la Plaza Mayor de Salamanca pierde el bigote

Félix Oliva

Salamanca

Viernes, 9 de febrero 2024, 13:01 | Actualizado 17:16h.

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La Policía Local ha logrado esclarecer lo ocurrido con uno de los bigotes del dragón chino de la escultura que adorna la Plaza Mayor y que ha visto como, en menos de 24 horas, ha perdido uno de sus elementos. Se pensó en un nuevo acto vandálico contra una pieza expuesta en la plaza, frecuentes en los últimos años, pero también en un accidente o en que se hubiera desprendido de forma fortuita.

Este jueves se registraron rachas de hasta 70 km/h en Salamanca durante toda la tarde y parte de la noche y el fuerte viento sólo cesó de madrugada, con lo que la posibilidad existe.

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La escultura fue colocada este jueves, 8 de febrero, al mediodía en un acto público con el escultor chino Xu Hongfei, que colabora hace años con el Ayuntamiento de Salamanca y que cede cada temporada una de sus esculturas, que han formado parte de varias exposiciones de calle.

A primera hora de la mañana, se ha comprobado que a la pieza le faltaba un pequeño elemento, uno de los bigotes de la cabeza del dragón que, junto con una mujer, forma la composición en bronce. Se trata de un hilo largo y de escaso diámetro.

Se pensó en un acto vandálico de los que hay precedentes. No obstante, y desde el primer momento, fuentes municipales aclararon que había constancia de que fuera una gamberrada. Se había empezado a revisar las cámaras de seguridad de la Plaza Mayor, monumento protegido, y no se había encontrado un autor intencionado.

A primera hora de la tarde, se daba a conocer la resolución. La rotura del bigote del dragón no ha sido un acto vandálico, sino que se había producido de manera accidental al acercarse una persona para hacerse una foto, según reflejan las cámaras de seguridad ubicadas en la plaza. Además, el elemento ha sido arreglado esta misma mañana.

No es la primera vez que se producen hechos de este tipo, aunque todos han sido intencionados y no fortuitos. De hecho, hace dos años la escultura del mismo autor colocada en la Plaza Mayor sufrió el robo del abanico y de una estrella. En una de las ocasiones el o los gamberros decidieron sustituir la pieza de bronce por un abanico de tela de color rojo.

La Policía Local inició entonces una búsqueda en redes sociales para recuperarlo. El elemento se sustituyó con permiso del autor. De hecho, la escultura instalada en la calle era de fibra y estos dos elementos en concreto estaban hechos de latón; la que el artista dona cada año a la ciudad es de bronce.

Años atrás, otra escultura callejera apareció destrozada tras ser arrojada escaleras abajo en la plaza de la Reina. Y es habitual que este tipo de exposiciones de calle, algunas con piezas valiosas, dispongan de un fuerte dispositivo de seguridad y vigilancia permanente para evitar hechos como la pintada en el verraco del Puente Romano años atrás, que no se pudo esclarecer porque las cámaras de vigilancia del patrimonio estaba averiadas.