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Cada final de temporada, centenares de botas, balones y camisetas de los equipos de fútbol de Salamanca se guardan en cajas y cajones después de haber rendido el alma por los terrenos de juego en miles de partidos y entrenamientos. Es material costoso que pasa al olvido, desplazado por las nuevas equipaciones que se estrenarán en unas semanas, pero parte es un tesoro extraordinariamente valioso que va a hacer una labor crucial a muchos kilómetros de la provincia.
La escuela Santiago Uno lleva quince años viajando a Marruecos para desarrollar sobre el terreno proyectos sociales. Este 2023 han partido este mismo sábado, 1 de julio, con un cargamento formado por medicinas, material escolar y una novedad, un importante cargamento de material deportivo cedido por el club de fútbol Hergar, idea a la que se han sumado otros equipos.
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La iniciativa surgió por el contacto entre ambas entidades y su origen es el denominado 'banco de botas' del club de fútbol. Nació como recurso para los jugadores, especialmente de las categorías más pequeñas del Hergar. Los responsables del club comprobaban que, a final de temporada, buena parte del material que se había usado, de balones a equipaciones y botas, se encontraba en un estado aceptable y podía pasar a los que se iban incorporando a categorías inferiores.
Con ello, se conseguía aquilatar el gasto y sacarle una segunda vida a material que, muchas veces, estaba en perfectas condiciones para seguir siendo usado o que podía apurar su vida útil. El volumen de material era importante y, dado que muchos deportistas optaban por estrenar cada temporada, se acabó buscando una salida, y esa fue la de entregarlo a la escuela Santiago Uno.
La escuela es toda una institución en Salamanca y desde hace años desarrolla el proyecto 'Llenando Escuelas' con el que ayudan al desarrollo en la provincia marroquí de Sidi Ifni. Allí han aterrizado este julio 28 alumnos y un grupo de profesores que se va rotando. Van a permanecer dos meses sobre el terreno y llevan trabajo que hacer.
Este verano van a construir una pista polideportiva y un parque infantil, van a arreglar una escuela y tendrán tiempo de ayudar en la mejora de alguna vivienda familiar. Además, montarán un dispensario médico y desplegarán actividades, entre las que el fútbol es imprescindible.
Para que los niños y jóvenes de la comarca hagan deporte, va a ser de gran ayuda el material deportivo que llevan de Salamanca. En el envío, treinta pares de botas, equipaciones, balones y material de todo tipo, parte nuevo y usado y bien cuidado que tendrá una segunda vida en Marruecos después de haber hecho toda la temporada en los campos de fútbol de Salamanca.
«La idea es que el año que viene nos organicemos para recoger material durante todo el año», explica Fernando Díaz, presidente del Hergar. «Si este año se han podido llevar tres cajas con botas, balones y equipaciones, que el año que viene sean veinte», asegura convencido de que lo van a conseguir.
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Sara I. Belled, Clara Privé y Lourdes Pérez
Clara Alba, Cristina Cándido y Leticia Aróstegui
Javier Martínez y Leticia Aróstegui
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