El primer recibo de agua del año en Salamanca llega con subida y problemas

Entre febrero y marzo los abonados del servicio del agua en Salamanca han ido recibiendo la primera factura del año. Esta llegaba con la subida aprobada en las ordenanzas ficales para 2023, del 8,7%, que convierte este suministro en lo que más ha subido en la capital. El incremento se ha notado en la factura con un aumento de lo que se paga por los mismos consumos. Según los datos del IPC, en febrero los suministros de agua y otros servicios de vivienda subieron un 3,8% y ha subido de precio un 9,6% en Salamanca en lo que va de año: es la mayor subida de todos los productos que contempla la estadística del IPC.

Sin embargo, la sorpresa ha sido encontrarse con dos incidencias que están provocando quejas y reclamaciones. Según los datos disponibles, muchos usuarios han comprobado que sus recibos vienen con una tarificación aparentemente errónea. En concreto, hay casos de facturas en las que se están cobrando consumos de 2022 con las tarifas de 2023.

Es habitual que las facturas lleguen con consumos de varios períodos. En el caso de la primera de este 2023, incluyen el gasto de días de 2022 y de 2023, pero según las quejas de los consumidores se han facturado ambos con las tarifas de este año, un 8,7% más caras. El incremento afecta también a la parte correspondiente a 2022 de otros conceptos de la factura, también afectados por la subida de este año.

Según una nota del Grupo Municipal Popular, en cumplimiento del Reglamento de este Servicio público y de la Ordenanza Municipal que regula sus tarifas, siempre se facturan anualmente a cada abonado cuatro periodos de tres meses a las tarifas vigentes en el momento de realizar la facturación. Es decir, que sería legal cobrar consumos de 2022 con las tarifas de 2023 si la factura se emite en este año, lo que explicaría la situación creada.

«Se están cobrando consumos de 2022 a precios de 2023», denunciaba esta mañana el portavoz del PSOE, José Luis Mateos. «Lo lógico es que en consumos previos al 1 de enero de 2023, que es cuando entran en vigor las nuevas tarifas, se apliquen precios y tarifas del año 2022, anteriores a la subida de casi el 9 %», ha denunciado el portavoz socialista.

Ante esta situación «gravosa» para la ciudadanía salmantina, el PSOE exige la paralización inmediata de todos los cobros que se están realizando por parte de la empresa concesionaria del servicio municipal de aguas para que no se aplique este «tarifazo» a conceptos y consumos del año pasado.

Además, hace unos días el PSOE municipal denunciaba también la llegada de un recargo en las facturas por un problema existente con la lectura de contadores. La nueva ordenanza fiscal de agua para este año 2023 impone un recargo cuando no es posible acceder a la lectura del contador durante tres periodos de facturación consecutivos.

Mateos ha asegurado que «este concepto ya se está cobrando con efecto retroactivo y es completamente ilegal que, por ejemplo, le llegue un recargo de 30 euros a gente que tiene un garaje porque no han podido leer el contador, porque si nadie te avisa, nadie está allí día y noche esperando a ver si viene el técnico del agua a mirarlo».