Borrar
Urgente Ribera asegura que «no hay indicios de sabotaje o ciberataque»
Carmen Vicente, museo 'Latidos charros' JM GARCÍA

La mujer que teje la historia de Salamanca desde hace más de 40 años

Carmen Vicente ha convertido su pasatiempo en un museo de historia. Una pasión transmitida durante generaciones que quiere conservar la esencia de lo charro, para que el pasado se convierta en patrimonio de las nuevas generaciones

Domingo, 13 de abril 2025, 11:50

Atuendos de más de 100 años de antigüedad. Prendas hechas todas a mano. Un devoción sin ánimo de lucro. Un pasatiempo convertido en museo. Un museo que recoge la historia de Salamanca.

No hay ánimo de lucro, solo amor y respeto hacia la tradición charra. Carmen siente paz cuando cose, cuando coloca abalorios, y su paz se convierte en orgullo una vez sus creaciones toman forma, visten a muñecas y después se agrandan a personas.

«Mi madre quiso hacernos a mis hermanas y a mi el primer traje charro. Sin embargo, le dije que no, que me quería hacer yo el mío y así empecé. No sabía coser, pero acabé haciéndome mi propio traje», cuenta Carmen Vicente, dedicada a esta labor desde hace más de 40 años. Habla desde su propia exposición, situada en el Centro Comercial el Tormes en el mes de febrero y marzo. Un sinfín de muñecas cuyos trajes también existen en tamaño real actúan de espectadores. Está representado Vitigudino, Las Arribes, Macotera, La Armuña, la Sierra de Francia, La Alberca, Villarino y Barruecopardo.

Feli Cañada, su mentora

La conocida Feli Cañada fue su mentora y así partiendo de cero llego al diez de diez. «Todo lo que sé me lo enseñó ella, con muchísima paciencia. Consistía en hacer y deshacer, hacer y deshacer. Eso y el gusanillo de que a mi madre le encantara coser este tipo de trajes... hizo que me apasionara. Incluso mis familiares me dieron cosas de sus antepasados que también están aquí restauradas -una capa de cuando su abuela se casó, entre otras piezas-», señala.

Del «poco a poco» pasó a que no entraran más trajes en su casa, por lo que comenzó a hacer trajes más pequeños para sus muñecas, ninguna comprada. «Es un vicio para mí; si yo estoy preocupada, tengo algún problema o algo que me ronda la cabeza, sea la hora que sea, me pongo a coser y se me pasa todo. No sé la razón, pero es mi pasión y cada vez me gusta más». Una pasión que dura y perdura durante 40 años.

«Siento orgullo, la verdad. Me acuerdo cuando empecé con mi profesora, con Feli y ella lo hacía a ojo, alucinaba de verdad; ahora yo lo hago a ojo, con un metro y una regla, y me salen perfectos», continúa.

La importancia de la esencia charra

Para Carmen resulta de especial importancia transmitir a sus hijos, sobrinas y nietos la esencia charra, una tradición que parece que forma parte del pasado, pero que cuenta con un gran presente y debe perdurar en el futuro. «Es el principal motivo por el que he querido hacer la exposición, para mantener la esencia charra», subraya.

«Quiero que la gente joven no pierda esta esencia tan importante, nuestras costumbres... por eso, a mi hijo le hice una capa charra y aquel tamboril es de mi nieto. No me gustaría que se perdieran las costumbres y por eso lo mantengo. Es cierto que hay mucho dinero invertido, pero es mi pasión, otros salen, fuman o beben, yo no».

¿Alguna vez se ha planteado convertirlo en negocio? «Nunca. Mientras pueda seguiré haciéndolo, para mis amigos, para mis familiares o para mí. No se me ha pasado por la cabeza, de momento, pero para mí sería vender parte de mi vida. Me gustaría que mis sobrinas o que mis nietos, mis hijos, se quedarán con parte de ello», responde.

El reto de definir lo inexplicable

Además de crearlos, también viste sus propios trajes. De Las Águedas, pasando por San Juan de Sahagún, hasta llegar a la ofrenda floral a la Virgen de la Vega. Incluso en días sueltos, con sus amigas y porque le da la gana. «Me gusta verme, me gusta vestirme y hacerme fotos, mirarme al espejo. Me encanta. Y además saber que lo he hecho yo... Soy feliz con los trajes charros, ¿qué hago? A veces pienso que yo viví otra vida en otra época. Me meto en la cama y pienso en lo que podría hacerle al manto que estoy haciendo para que sea diferente».

¿Y qué se siente? «Es inexplicable. Te reto a que te vistas con uno de mis vestidos y sepas como es. Es saber que vas con lo tuyo, que vas de charro».

Y.... reto aceptado.

Continuará en septiembre.

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para registrados.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

salamancahoy La mujer que teje la historia de Salamanca desde hace más de 40 años

logo

Debido a un error no hemos podido dar de alta tu suscripción.

Por favor, ponte en contacto con Atención al Cliente.

logo

¡Bienvenido a SALAMANCAHOY!

logo

Tu suscripción con Google se ha realizado correctamente, pero ya tenías otra suscripción activa en SALAMANCAHOY.

Déjanos tus datos y nos pondremos en contacto contigo para analizar tu caso

logo

¡Tu suscripción con Google se ha realizado correctamente!

La compra se ha asociado al siguiente email