Adiós a Elena Rodríguez, el «motor» para que las cosas funcionen, para que la educación avance

María Pedrosa

Miércoles, 29 de mayo 2024, 17:49

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No es fácil poner palabras a lo ocurrido. Ni mucho menos hablar en pasado. Salamanca ha despedido este jueves, 29 de mayo de 2024, a Elena Rodríguez, una persona «motor» para que «todo funcione», una sonrisa incansable, para los que la conocían, una figura capaz de ensalzar la labor docente e institucional de la mano de la comunicación, el diálogo y el emprendimiento.

Tras su trágico fallecimiento, fueron continuas las muestras de cariño que llegaron al Centro de Integración y Formación Profesional Río Tormes, que esperaba su llegada esa mañana. Había visita. Ella movía el Centro. Las redes, una de sus principales pasiones, se llenaban de mensajes. También en el tanatario, donde familiares, amigos y personalidades institucionales mostraron respeto y cariño. El director del citado instituto, inmediatamente después de conocer la noticia, declaró dos días de luto y la suspensión de las clases.

El jueves, la jornada lectiva, de la misma forma que los minutos esperando su llegada el martes, se hará eterna.

El resto de centros de formación profesional de la comunidad se unieron a las condolencias, una muestra de la cantidad de 'redes' que tendía y unía en torno a su pasión, la formación profesional, el progreso de su alumnado. «Siempre atenta», señalan los estudiantes. «Una de las mejores profesionales», califica Rocío Lucas, consejera de Educación de Castilla y León.

El propio presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, se mostraba «consternado». «Tuve el placer de compartir su pasión por la enseñanza durante la inauguración del curso 22/23. Una gran mujer y profesional que deja un enorme vacío en la comunidad educativa. Todo mi cariño a su familia, compañeros y amigos. Un fuerte abrazo», apuntaba.

También el colegio Salesiano de Salamanca de María Auxiliadora, colegio del que sus dos hijos son alumnos. «Toda la comunidad educativa se une en apoyo y cariño hacia su familia en estos momentos tan sifíciles. Nuestro más sentido pésame y oraciones. Descanse en paz», redacta el comunicado.

Junto a todos ellos, el colegio Sagrado Corazón - Jesuitinas Salamanca, del que ella era antigua alumna; el Centro de Formación Permanente del Profesorado e Innovación Educativa de Salamanca, el Centro de Formación e Innovación Educativa de Zamora, Palencia y el de Valladolid, el IES Antonio Machado, el servicio de formación del profesorado innovación e internacionalización de Castilla y León, también la Asociación de Inspectores de Educación de Castilla y León miembros de ADIDE Federación, el IES Germán Sánchez Ruipérez o el Instituto de Educación Secundaria Federico García Bernalt

La lista es infinita y el hecho habla por sí solo. La UPSA (Universidad Pontificia de Salamanca) recodaba su «compromiso con la educación, capaz de que pudiésemos contar con su ayuda en el Programa Talent Junior». La Asociación de Centros de Formación Profesional, destacaba su «huella imborrable».

No es fácil escribir estas palabras. Elena siempre encontraba las adecuadas. Que el amor con el que se la despide perdure en el recuerdo de su memoria.

Descanse en paz.