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Cristian Reino
Barcelona
Lunes, 12 de junio 2023, 10:40
Crisis de gobierno en la Generalitat catalana. ERC le ha visto las orejas al lobo tras el fiasco electoral en las municipales y Pere Aragonès ha decidido reforzar su ejecutivo con la sustitución de tres consejeros. Intenta abrir una nueva etapa en el ecuador de ... su mandato y a mes y medio de las elecciones generales.
Tras el nombramiento de Teresa Jordà como número 2 de la lista de ERC al Congreso, Aragonès ha aprovechado para acometer una remodelación gubernamental y ha anunciado este lunes el relevo en las consejerías de Acción Climática (Teresa Jordà), Territorio (Juli Fernández) y Educación (Josep González). Les sustituyen David Mascort, Ester Capella y Anna Simó, respectivamente. Fernández solo ha estado ocho meses en el cargo. Quedó muy tocado después de que ERC y el PSC pactaran el proyecto de la B-40, al que se oponía, para la aprobación de los presupuestos de la Generalitat. Gonzálaz Cambray ya ha sido reprobado por el Parlament y hace meses que los sindicatos educativos piden su cabeza. Encabezó el desafío del Govern a la sentencia del 25% de español en la enseñanza.
En el ecuador de la legislatura, Aragonès ha señalado que cree que necesita «energías renovadas» para dar estabilidad a un ejecutivo que se propone llegar hasta el final del mandato, en febrero de 2025. Se trata de la segunda crisis de gobierno en Cataluña en poco tiempo, tras la que se produjo como consecuencia de la salida de Junts del Govern. Fue en octubre de 2022. Ocho meses después, Aragonès ha remodelado el 20% de su gobierno. «A los dos años de la legislatura, tenemos la oportunidad de dar energías renovadas», ha afirmado Aragonès en una comparecencia desde la galería gótica del Palau de la Generalitat. «Quiero completar la legislatura», ha señalado. La «estabilidad es imprescindible», ha expresado el jefe del Ejecutivo catalán.
El presidente de la Generalitat ha tratado de desligar la decisión de cesar a tres consejeros del resultado de ERC en las elecciones. Pero llega dos semanas después y a los días de que el partido recibiera las primeras críticas internas de su partido. Tanto Capella como Simó son veteranas dirigentes de ERC, con peso en el partido y experiencia anterior en Govern. Simó fue condenada a 4 meses de inhabilitación por desobediencia como miembro de la Mesa del Parlament que permitió la tramitación de las leyes de la desconexión previas al 1-O.
Si Pedro Sánchez respondió al fiasco electoral de su partido convocando elecciones, Aragonès lo ha hecho con una remodelación de su ejecutivo. Su primer movimiento después de las elecciones fue llamar a la unidad del independentismo para hacer frente a las elecciones del 23-J y de cara a un posible futuro gobierno del PP y Vox.
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