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J. Bacorelle
Domingo, 11 de febrero 2024
La posibilidad de emprender viajes largos con tranquilidad es una de las principales barreras para la adquisición de modelos eléctricos. En respuesta a esto, ha llevado a muchos fabricantes a ofrecer modelos que presumen de una autonomía significativa, pero con baterías más pesadas, más caras ... y que consumen más energía.
Citroën ha optado por baterías de tamaño razonable, compactas, ligeras y asequibles. Esta elección resulta una ventaja para los desplazamientos diarios, donde una batería pesada es una desventaja. Unida a una capacidad de carga rápida de 100 kW y a un motor eficaz, permite afrontar con serenidad los trayectos largos.
Para arrojar luz sobre la autonomía y la eficacia de su oferta eléctrica, Citroën encargó a un grupo independiente de renombre mundial, UTAC, que evaluara la posición del ë-C4 X dentro de su panorama competitivo y respondiera a la pregunta: «¿Qué modelo eléctrico tarda menos en recorrer 1.000 km?».
Esta es la pregunta a la que se enfrenta un cliente cuando se enfrenta a especificaciones como el tamaño de la batería, la autonomía certificada, el peso, la velocidad de carga, etc., sin comprender del todo cómo se traducen en un uso en el mundo real. Para proporcionar puntos de referencia, se encargó a UTAC que realizara la prueba en condiciones similares con vehículos de la competencia ë-C4 y ë-C4X: Renault Mégane e-Tech, Volkswagen ID 3 y MG 4.
Estos modelos se probaron durante dos días, en condiciones meteorológicas idénticas, siguiendo el mismo protocolo: Conducción a una velocidad estabilizada de 120 km/h en el anillo de alta velocidad del circuito de Mortefontaine. Inicio de la prueba con el vehículo al 100% del estado de carga (SOC) de la batería. La conducción se detiene cuando la batería alcanza un nivel de carga del 10%. Y a continuación, el vehículo se recarga hasta el 80%. Las recargas se alternaron entre una estación de carga de 100 kW y otra de 50 kW, en función de la capacidad del emplazamiento.
El Citroën ë-C4 X fue el más rápido en completar los 1.000 km, con un tiempo total, recarga incluida, de 11 horas y 57 minutos. Los competidores tardaron entre 14 y 67 minutos más en recorrer la misma distancia. Los resultados, tal y como indican las mediciones de UTAC, se explican por un menor consumo de energía y unos tiempos de recarga optimizados, lo que confirma las soluciones técnicas elegidas para el ë-C4 X y, por extensión, para el ë-C4.
Las mediciones realizadas por los expertos de UTAC ponen de manifiesto que el ë-C4 X requiere paradas de carga más cortas y presenta un menor consumo de energía en comparación con otros modelos. La combinación de estos dos factores le permitió recorrer los 1.000 km en 11 horas y 57 minutos, casi 15 minutos mejor que el competidor más próximo.
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