Kiev recomienda evacuar el este y el sur del país antes de la llegada del frío

«Quienes puedan deben irse de forma gradual», indicó a la televisión pública, al tiempo que recomendó que nadie regrese a estas zonas antes de la próxima primavera, coincidiendo con la previsible llegada del calor. Ucrania se prepara en su parte este para un invierno en el que la calefacción, la electricidad o el agua pueden no estar garantizados.

En este clima, la misión del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), formada por catorce expertos, llegó en la tarde de ayer a la región de Zaporiyia en un convoy de veinte vehículos y tras nueve horas de viaje con el objetivo de monitorizar la planta nuclear. El director del OIEA, Rafael Grossi, señaló que el trabajo comenzará hoy, cuando empezarán a hacer «evaluaciones técnicas de la situación» y hablarán con el personal de la central.

«Vamos a pasar unos días allí», anunció Grossi antes de poner rumbo a Zaporiyia, ubicada a más de 500 kilómetros de Kiev, donde fue recibido el martes por el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, quien ofreció su compromiso con la misión.

El máximo responsable del OIEA pidió «garantías» a ambas partes para poder ejercer su trabajo en la central, tomada por las fuerzas rusas desde principios de marzo. El objetivo, según detalló, es que la delegación trabaje para estabilizar la situación «en la medida de lo posible». «Vamos a intentar establecer una presencia permanente de la agencia a partir de ese momento», declaró.