Las enfermeras británicas se enfrentan al Gobierno de Sunak

Pat Culen, secretaria general del Colegio, fundado en 1916 y convertido con el paso del tiempo también en un sindicato, lidera las movilizaciones, que tienen como reivindicación más vistosa un aumento de los salarios del 19%. El Gobierno rechaza la petición y el Partido Laborista, en la oposición, también ha señalado que no aceptaría un incremento de ese nivel si estuviese gobernando, aunque negociaría una solución.

Culen, en entrevistas a la BBC, no ha expresado una defensa tajante de ese porcentaje. Denuncia que el problema central es que el ministro de Sanidad, Steve Barclay, no ha querido sentarse con el sindicato para negociar en detalle tanto el salario como las condiciones de trabajo. Poco más de un cuarto del personal del Servicio Nacional de Salud (NHS) está satisfecho con su trabajo.

La escala salarial de las enfermeras, por bandas, va desde 31.000 euros anuales para las principiantes hasta más 110.000 para las de mayor cualificación y responsabilidad directiva, pasando por los 55.000 que puede ganar una responsable de planta con cinco años de experiencia. Hay decenas de miles de plazas disponibles, que, tras el Brexit, se cubren con enfermeras asiáticas, en particular de Filipinas.

El NHS tiene un sistema de revisión salarial basado en las recomendaciones de un ente independiente que presenta cada año un informe sobre la gestión de personal y el aumento salarial. En agosto de este año propuso uno del 4%, recordando el programa de reducción de costes que se ha puesto en marcha tras los Presupuestos extraordinarios de la pandemia. El coste de personal es el 65% de las cuentas del NHS.

El Gobierno se parapeta tras esa sugerencia, recordando que el personal del NHS recibió un aumento de salario mayor que el de otros empleados del sector público en 2021-22 como reconocimiento de su trabajo durante la covid. Pero dos diputados conservadores han pedido este jueves a su Gobierno que modifique su posición y revise el aumento propuesto. En Escocia, el Ejecutivo ha negociado una subida del 7.9%, aceptado por uno de los sindicatos.

Las enfermeras repetirán su protesta el martes. Fisioterapeutas y personal del servicio de ambulancias se han sumado a la ola de huelgas. La de las enfermeras es dispersa geográficamente y además se ha pactado el mantenimiento de servicios que puedan afectar a pacientes con diagnóstico grave. Es también una huelga popular en un país que se sumó a los aplausos diarios al personal sanitario hace unos meses.