EE UU bombardea el este de Siria para limitar nuevos ataques de milicias proiraníes

Sin identificar los objetivos ni ofrecer cifras de víctimas, el comunicado describió los ataques como «acciones proporcionadas y deliberadas» destinadas a limitar las posibilidades de escalada y minimizar el riesgo de víctimas. El Gobierno iraní, así como los medios estatales sirios, no reconocieron de inmediato la operación en Deir Ezzor.

El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, contrario al régimen de Bashar el-Asad, y el colectivo activista Deir Ezzor 24, informaron que los bombardeos tuvieron lugar en el campamento Ayash, dirigido por el grupo Fatimiyoun, formado por combatientes chiíes de Afganistán. Según el Observatorio, al menos seis militantes sirios y combatiente extranjeros murieron.

El ataque con drones del 15 de agosto, supuestamente lanzados por las milicias respaldadas por Irán, fue dirigido contra la guarnición de Al-Tanf, un complejo dirigido por tropas estadounidenses y combatientes de opositores sirios respaldados en el este de Siria por EE UU, cuyas tropas ingresaron en el país árabe en 2015 para respaldar a las fuerzas aliadas en su lucha contra el Estado Islámico.

Deir Ezzor, por su parte, es una provincia estratégica que limita con Iraq y contiene yacimientos petrolíferos. Los grupos de milicias subsidiarias de Irán y las fuerzas sirias controlan el área y, en el pasado, han sido objetivo de ataques aéreos israelíes.

Los bombardeos de ayer fueron dirigidos contra instalaciones de infraestructura utilizadas por grupos afiliados a la Guardia Revolucionaria de Irán, incluido un grupo de búnkeres utilizados para el almacenamiento de municiones y apoyo logístico.

Según Buccino, el ataque tenía como objetivo 11 de los 13 búnkeres, aunque al final el ataque sólo se llevó a cabo en 9 de ellos, descartando 4 de los almacenes, debido a que la información de Inteligencia militar detectó la presencia de personas en dos de ellos y no pudo asegurar que los otros dos estuvieran libres de personas.