Un policía arrojó a un hombre por un puente el pasado lunes en la ciudad brasileña de Sao Paulo. Según han informado fuentes judiciales, el agente ya ha ingresado en prisión preventiva. Lo que ocurrió durante lo que era, al parecer, un control rutinario no es un hecho aislado. Un ciudadano captó el momento en el que el policía decidió tirar a la víctima y lo compartió en las redes sociales. El vídeo no tardó en correr como la pólvora y copar los titulares de los principales medios de comunicación de Brasil.
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El agente se llama Luan Felipe Alves Pereira, y el Tribunal de Justicia Militar de Sao Paulo lo ha procesado por «violencia arbitraria». La víctima sobrevivió a la caída y «está bien», aseguró su padre, Antonio Donizete, en declaraciones para la cadena Globo, donde dijo que su hijo nunca ha tenido problemas con la Policía. En el vídeo, se ve a varios agentes que presenciaron la escena. La Secretaría de Seguridad de São Paulo ha informado de que, en total, 13 policías han sido apartados de sus cargos hasta que se esclarezca su responsabilidad en el caso.
El incidente ha desatado una ola de movimientos sociales para protestar contra la violencia policial en la ciudad paulista. Muchos echan la culpa de la escalada de brutalidad por parte de las autoridades al gobernador, Tarcísio de Freitas, que asumió el cargo el 1 de enero de 2023. El mandatario ha condenado este último episodio: «Quien llega al absurdo de arrojar a una persona por el puente, evidentemente no está preparado para llevar el uniforme».
El caso de Gabriel Renan da Silva Soares, un hombre de 26 años, también causó un gran revuelo en el país latinoamericano. Su asesinato a manos de un policía fuera de servicio en un supermercado fue captado por las cámaras de seguridad del establecimiento, y las imágenes se han divulgado hace apenas un par de días. El motivo por el que le disparó 11 tiros por la espalda fue porque la víctima había robado productos de limpieza para el hogar. Estaba desarmado. Según ha informado el departamento policial, «el policía militar se encuentra alejado de las actividades operativas. El caso continúa bajo investigación del Departamento de Homicidios y Protección Personal (DHPP)».
Según los datos que manejan desde el Ministerio Público, las muertes a manos de agentes de policía en Sao Paulo se han incrementado un 46% respecto al año pasado. En el plazo de doce meses, 673 personas han sido asesinadas por la Policía Militar, frente a las 460 del ejercicio anterior. Esto equivale, aproximadamente, a dos víctimas por día.
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