La princesa de Gales tiene cáncer

Sentada en un banco de madera en un jardín de la residencia familiar de Kensington, con gesto serio, ropa informal y una extrema delgadez marcada en el rostro, la esposa del príncipe Guillermo -la figura de la familia real más querida por los británicos- reveló que ha iniciado un tratamiento con quimioterapia para combatir el cáncer que se le ha detectado. No especificó de qué dolencia se trata y lo único que se conoce es que se le ha detectado después de la cirugía abdominal a la que se sometió a comienzos de año.

La propia Catalina reconoce que la noticia supuso una «enorme conmoción» y que ha acarreado dos meses «increíblemente duros». «Estoy bien y cada día estoy más fuerte», recalca en el vídeo. Y ofreció la versión oficial de lo que ha acontecido en los últimos meses. «Me he sometido a una cirugía abdominal en Londres y en un primer momento se ha considerado que no se trataba de una dolencia cancerosa. La cirugía fue un éxito, sin embargo, las pruebas posoperatorias han determinado que existen células cancerosas. Mi equipo médico por tanto ha considerado que debo someterme a un tratamiento preventivo de quimioterapia. Ahora estoy en la primera fase del tratamiento», explicó antes de insistir en que el diagnóstico le ha supuesto «un gran 'shock'».

En este punto, la duquesa de Cambridge revela el porqué de tanto secretismo en las últimas semanas: proteger a sus hijos de la noticia, de un diagnóstico que golpea a cualquier familia y más si hay tres niños pequeños, como en este caso. «El príncipe Guillermo y yo estamos haciendo todo lo que posible para gestionar este proceso desde la privacidad para el beneficio de nuestra joven familia», subrayó Catalina. «Lo más importante -insistió- es conseguir tiempo para poder explicárselo a George, Louis y Charlotte de una forma apropiada para ellos y tranquilizarles de que voy a estar bien». Y lanzó una recomendación, que dio la sensación de estar dirigida hacia la prensa. «Esperamos que entendáis que, como familia, necesitamos tiempo, espacio y privacidad mientras termino mi tratamiento».

Siguiendo la pauta del rey Carlos III, a quien se le detectó un cáncer también en enero, la princesa de Gales ha decidido dirigirse públicamente a las personas que padecen la misma enfermedad. «A todos los afectados por el cáncer, en cualquier forma, os pido que no perdáis la fe o la esperanza. No estáis solos». Explica también que la recuperación de la cirugía ha llevado tiempo y su prioridad es, en todo caso, «estar centrada en conseguir una recuperación completa»

Los dos meses que han pasado desde que la princesa de Gales pasase por el quirófano han supuesto un hervidero de especulaciones sobre su estado, que se han visto avivadas por el silencio de la Casa Real. El episodio que más extrañeza causó fue la cancelación súbita por parte de Guillermo, su esposo y heredero al trono, de su presencia en el acto religioso en memoria del rey Constantino de Grecia, en Windsor. Un acto al que acudieron miembros de toda la realeza europea. El Palacio de Kensington, donde la pareja tiene su aparato administrativo, admitió a la cadena pública BBC de que aquella ausencia se debió a que en aquellas jornadas se le descubrió el cáncer.

Después llegarían el silencio, las especulaciones y la fotografía con sus hijos de hace dos semanas que tuvo que ser retirada después de que las agencias descubrieran que estaba trucada y con numerosos retoques. Hasta el punto de que algunos especialistas aseguraban que el rostro de Kate había sido incluida de forma artificial y que pertenecía a una sesión de hace varios años para una revista de moda.

De ahí que el mensaje difundido este viernes por la tarde a través de las redes sociales de la casa del príncipe Guillermo trate de acabar con todas las especulaciones y frenar la escalada de rumores sobre la duquesa de Cambridge, y el heredero. Esta semana los tabloides daban a conocer un vídeo grabado por un vecino en la que se veía a los príncipes de paseo junto a un mercado de flores.

Mayor preocupación habían generado las informaciones en las que se apuntaba a que la ausencia de Catalina de la vida pública obedecía a un supuesto divorcio y a que Guillermo tenía una amante. Todos esos rumores quedan enterrados con las palabras que Kate dedicó a su pareja. «Tener a Guillermo a mi lado es también una gran fuente de confort y de seguridad». «También lo ha sido el amor, apoyo y gentileza que muchos me habéis mostrado. Significa mucho para ambos», insiste en el vídeo.

La BBC afirmaba ya por la noche que, en contra de lo que anunciaban los medios británicos en los últimos días, no se espera que la familia real comparezca en el servicio religioso del Día de la Resurrección y tampoco el desempeño por Catalina de funciones públicas a partir del 17 de abril, cuando sus hijos vuelven al colegio.