Los Reyes realizaban este domingo la primera salida familiar durante su estancia en Mallorca. De este modo cumplían con la tradición instaurada en los últimos años de irse de cena toda la familia, a excepción de don Juan Carlos. El Monarca, tras entregar los premios de la 421 Copa del Rey-MAPFRE, en el que conseguía el segundo puesto con el AIFOS -Sofía escrito al revés-, organizaba una cena familiar a la que invitaba también a otros familiares por parte materna.
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El restaurante escogido para la ocasión era Mía, de Guillermo Cabot, el mismo en el que cenaron el año pasado, ubicado en la zona de Portixol. Doña Sofía llegó al local del brazo de su hijo con gestos cómplices. En el otro extremo se situaba doña Letizia, mientras que unos pasos atrás caminaban sus hijas. La infanta Sofía empujó la silla de ruedas de Irene de Grecia, la hermana de doña Sofía, a la que cuidan entre todos por el deterioro cognitivo que sufre, mientras que la princesa Leonor, llevó, también en silla de ruedas, a Tatiana Radziwill, prima tercera de la reina emérita. Su relación es tan estrecha que se la considera la tercera hermana de la madre de Felipe VI. Junto a ellas iba el marido de Tatiana, el cardiólogo Jean Henri Fruchaud.
En el interior del restaurante coincidieron con la actriz Teri Hatcher, que dio vida a Susan Mayer en la famosa serie 'Mujeres Desesperadas'. La intérprete, que degustaba un plato de pasta regado con vino junto a su única hija, Emerson, vio pasar por delante de su mesa a la Familia Real, lo que le dejó boquiabierta mientras observaba con detenimiento a don Felipe y a doña Letizia.
La Reina estrenó para la ocasión un vestido midi de la creadora del sello Adlib Ibiza Virginia Vald. La pieza exclusiva, inspirada en doña Letizia, está realizada en la isla Pitiusa100% y pertenece a la próxima colección primavera-verano 2025, por lo que aún no está a la venta. El modelo Brisa es asimétrico y con flores bordadas en tonos rosa, fucsia y blanco, con cuello halter y falda con vuelo.
Esta no es la primera ocasión en la que la Reina luce prendas y accesorios de los diseñadores pertenecientes al sello Adlib Ibiza, estandarte de la artesanía y la sostenibilidad, ya que en otras ocasiones ha lucido piezas de Espardenyes Torres, Vintage Ibiza y Charo Ruiz.
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Las sandalias planas, con tiras cuajadas de cristales de Swarovski, estaban firmadas por Pedro García. El guiño estilístico de doña Letizia a Mallorca lo realizó con un bolso de mano con el estampado tradicional de lenguas, de la firma local Feel Mallorca.
Por su parte, la princesa Leonor se enfundó un vestido camisero de estilo boho con estampado étnico en tonos azules de la firma francesa Karl Marc John y unas alpargatas blancas de la española Mint & Rose que ya ha calzado en otras ocasiones. En el hombro, un bolso de la también francesa Sézane a juego con el vestido.
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La heredera pondrá rumbo a la Escuela Naval de Marín, en Pontevedra, el próximo 29 de agosto. Allí continuará con su formación militar los próximos meses tras su paso por la Academia Militar de Zaragoza. Cuatro días antes será su hermana, la infanta Sofía, la que finalice sus vacaciones regresando al colegio de Gales en el que cursa sus estudios, el UWC Atlantic College, donde realizará el segundo curso de Bachillerato Internacional.
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