Las pymes podrán ya optar a ayudas por la semana laboral de cuatro días

Las pymes que reduzcan la jornada laboral al menos un 10% sin reducir el salario de sus trabajadores y mantengan esta situación durante al menos dos años podrán recibir ayudas públicas de hasta 150.000 euros. El acuerdo entre el Gobierno y Más País, la formación política liderada por Íñigo Errejón, para aprobar los Presupuestos Generales del Estado para 2022 estableció una partida de 10 millones de euros para estudiar la implantación de la semana laboral de 32 horas, lo que permitiría subvencionar a 66 empresas si todas recibieran el máximo de ayudas, aunque estas se establecerán en función del número de trabajadores y los costes asumidos por la empresa. No obstante, Más País calculaba que podrían beneficiarse hasta 160 empresas y unos 3.000 trabajadores.

El proyecto de orden ministerial, que será publicada próximamente, se sometió a consulta pública el pasado mes de junio y en él se marcaban como objetivos mejorar la productividad, la conciliación laboral, la igualdad de oportunidades y la salud física y mental de los trabajadores.

Junto a la reducción de jornada, las empresas tendrán que incorporar una serie de medidas organizativas y de procesos productivos, así como acciones de formación, que generen una mejora de la productividad que compense los mayores costes salariales. Las ayudas públicas pretenden financiar parcialmente los costes salariales del personal afectado por la reducción de la jornada laboral, los costes de formación relativa a la optimización del tiempo de trabajo de los trabajadores afectados a la implementación del proyecto piloto, y los costes de colaboraciones externas o costes de personal interno necesarios para el diseño o rediseño de procesos afectados por el proyecto piloto y directamente vinculados a la producción de los bienes y servicios de la empresa.

También se fijarán indicadores para medir la evolución de la productividad. Según datos de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), más horas de trabajo no se traducen en una mayor productividad. Este organismo mide la productividad laboral de cada país mediante el indicador PIB por hora trabajada, y que tiene en cuenta el total de horas trabajadas. Estos datos reflejan que hay países que trabajan menos horas y, sin embargo, son más productivos. España se ha caracterizado por un débil crecimiento de la productividad, entre otras causas por la organización del trabajo.

Desde el Ministerio de Industria subrayan que hace tiempo que se viene reclamando transformar el sistema económico para obtener mejoras de la productividad, favorecer la conciliación y fomentar la paridad e igualdad de oportunidades. La emergencia climática y la crisis derivada de la pandemia, han puesto todavía más de relieve la necesidad de introducir estos parámetros, explican, y el teletrabajo ha generado un debate sobre cómo pueden explorarse nuevas vías de organización empresarial y nuevas relaciones en el trabajo.

Algunas empresas han ofrecido a sus trabajadores la semana laboral de cuatro días, como Telefónica el pasado mes de julio, que no consiguió muchas adhesiones porque implicaba una reducción de sueldo.