El Gobierno flexibilizará ayudas a la automoción tras el amago de la gigafactoría

Las palabras de Sánchez defendiendo las bondades de la economía española han llegado después de que el Ministerio de Industria aumentara el pasado viernes la dotación del Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (Perte) y hasta los 880 millones de euros los fondos al mismo tiempo que prometía una nueva convocatoria de ayudas. En este sentido, Sánchez ha insistido en que el Ejecutivo «va a hacer todo lo que esté en su mano para que los proyectos de los fabricantes sean existosos». Una nueva muestra de apoyo al sector, consciente de lo que se juega ante cualquier movimiento público que modifique las estrategias de las automovilísticas.

Al mismo tiempo, y casi a la misma hora, la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, y el presidente de Ford España, Jesús Alonso, han anunciado que el Ejecutivo y la multinacional trabajarán conjuntamente para que esta pueda concurrir a la segunda convocatoria del Perte del vehículo automóvil eléctrico (Perte VEC), que se abrirá en el primer trimestre de 2023, a fin de llevar la electrificación de la fábrica de Almussafes (Valencia). Para ello, Maroto ha explicado que se trabajará con Bruselas para poder «acomodar en los tiempos que Ford necesita esta inversión» y los plazos de ejecución, de manera que se pueda ajustar la adaptación de la fábrica a la producción de vehículos eléctricos.

Así lo han manifestado este lunes, en declaraciones a los medios, durante la visita que ha realizado la ministra a las instalaciones de Almussafes, en la que han participado también el presidente de la Generalitat valenciana, Ximo Puig; el vicepresidente de asuntos gubernamentales internacionales de Ford, Matthew Godlewski; el presidente de Ford España, Jesús Alonso, y el director de fabricación, Dionisio Campos.

Por su parte, el grupo Renault ha anunciado en la visita de Sánchez a Valladolid que prevé incorporar a 500 ingenieros en sus plantas de Valladolid (motores y vehículos), con lo que se incrementa un 50% sus efectivos, hasta alcanzar los 1.500, algo que se produce tras las llegada del cuarto plan industrial que ha llevado consigo además un «profunda» renovación de sus instalaciones. El presidente de Renault España, José Vicente de los Mozos, quien ha dado a conocer la «consolidación» de este centro tras la llegada del cuatro plan industrial.

En el trasfondo de este bache inesperado para el Ejecutivo durante la semana pasada subyacía la falta de ejecución de una buena parte del importe inicial anunciado para este y otros grandes proyectos automovilísticos. La nueva convocatoria llega después de que el inicial solo haya podido adjudicar el 29,5% del presupuesto, que asciende a 2.975 millones.

Los Perte se habían convertido en una de las palancas utilizadas por el Ejecutivo para reactivar la economía tras el parón del coronavirus. Pero como ha ocurrido con parte de los fondos europeos durante 2021 y 2022, su ejecución sigue arrastrando obstáculos administrativos que impiden una ágil ejecución, una de los reproches planteados habitualmente por organismos como el Banco de España o la Autoridad Fiscal. De hecho, Salvador Navarro, presidente de la Confederación Empresarial Valenciana (CEV) ha asegurado «que hay que ser muy cautos», aunque ha coincidido en la queja de la multinacional «del exceso de burocracia» para acceder a los fondos europeos. «La ejecución de los Perte está muy por debajo de lo que debería ser», ha insistido.

El propio presidente del Gobierno se pronunciaba este viernes desde Bruselas al respecto para indicar que van a seguir trabajando con todos los fabricantes «para que España continúe siendo un referente mundial del coche eléctrico, incluidas las baterías, y su fabricación en España, con importantes proyectos como el de la gigafactoría de Sagunto». La lista de espera no es baladí. Junto al proyecto valenciano se encuentra otro grandes puntos de atracción, la gigafactoría proyectada en Navalmoral de la Mata (Cáceres) por la empresa china Envision. El resto de proyectos (hasta 13, según anunció el Gobierno en verano) se distribuyen en más de la mitad de las comunidades autónomas, como el de Nissan en Cataluña; Irizar en el País Vasco; así como los que quedan por definir de grandes automovilísticas con presencia en España como Stellantis (Vigo, Zaragoza y Madrid), Renault (Castilla y León) o Mercedes Benz (Vitoria), entre otros.

La ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, y el presidente de Ford España, Jesús Alonso, han anunciado que el Gobierno y la multinacional trabajarán conjuntamente para que esta pueda concurrir a la segunda convocatoria del Perte del vehículo automóvil eléctrico (Perte VEC), que se abrirá en el primer trimestre de 2023, a fin de llevar la electrificación de la fábrica de Almussafes (Valencia).

Para ello, Maroto ha explicado que se trabajará con Bruselas para poder «acomodar en los tiempos que Ford necesita esta inversión» y los plazos de ejecución, de manera que se pueda ajustar la adaptación de la fábrica a la producción de vehículos eléctricos.

Así lo han manifestado este lunes, en declaraciones a los medios, durante la visita que ha realizado la ministra a las instalaciones de Almussafes, en la que han participado también el presidente de la Generalitat valenciana, Ximo Puig; el vicepresidente de asuntos gubernamentales internacionales de Ford, Matthew Godlewski; el presidente de Ford España, Jesús Alonso, y el director de fabricación, Dionisio Campos.

Por otra parte, desde la firma del óvalo han confirmado que la producción de vehículos eléctricos conllevará menos manos de obra y que, a partir de enero, trabajarán con los sindicatos para negociar cómo abordar este proceso.