Claudia Buch se impone a Margarita Delgado en la carrera por presidir el Consejo de Supervisión del BCE

La decisión, pese a todo, no es definitiva. Buch deberá comparecer ante la Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios del Parlamento Europeo y después recibir el apoyo de la mayoría del pleno. Después, Buch deberá lograr el respaldo de las veintisiete capitales europeas antes de ocupar el cargo a partir del 1 de enero de 2024 por un periodo de cinco años no prorrogables.

El organismo se encarga de la supervisión preventiva de las grandes entidades europeas y es independiente del área de política monetaria del BCE. Su presidencia es uno de los cargos comunitarios que se reparten entre los Estados miembros –los denominados como 'top jobs'– para tratar de mantener un equilibrio entre las capitales europeas.

La presidencia del Banco Europeo de Inversiones (BEI) a la que aspira la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, es otro de esos puestos. Se espera que su candidatura se debata en la reunión de ministros europeos de esta semana en Santiago de Compostela. Es más, la elección de Buch podría ser parte de un intercambio de fichas entre España y Alemania, de cara a lograr el apoyo alemán en la designación de Calviño.

La influencia alemana en el BCE también ha resultado clave en la nominación de Buch, preferida igualmente por la presidenta de la institución, Christine Lagarde. Delgado, por su parte, recibió el apoyo unánime de la Comisión de Asuntos Económicos de la Eurocámara en junio y su máxima responsable, la italiana Irene Tinagli, defendió que era la candidata idónea para ocupar el puesto.

Esta delicada decisión llega a tan solo un día de la reunión de política monetaria del BCE, en la que podría anunciarse una nueva subida de los tipos de interés (actualmente en el 4,25%).