Unionistas se lanza a por el play-off de ascenso tras sumar su repóker en Ceuta

El conjunto charro saltó al césped decidido a dar un golpe encima de la mesa y asaltar la última plaza en disputa que da permiso a jugar la promoción de ascenso. Dani Ponz repitió el mismo once que goleó al Real Madrid Castilla y sobre el feudo ceutí se vio a un Unionistas atrevido en los primeros minutos. Héctor Nespral avisó con un remate desde la frontal que atajó en dos tiempos Tomás Mejías.

Incisivos por los costados, Chapela y Juanpa fueron cogiendo ritmo a medida que pasaban los minutos. El propio Chapela se inventó una jugada personal para ceder el balón a la posición de De la Nava que, a bocajarro, vio cómo Capa se anticipaba para negarle el primer tanto. El único aviso de un Ceuta incómodo en su propio feudo, llegó con un remate desde el balcón del área de Alain que se marchó lamiendo el palo.

Sin embargo, Unionistas respondió en forma de gol. Juanpa recogió un buen servicio de Héctor Nespral y vio cómo su centro impactaba en la espalda de Alain para que el cuero describiera una parábola imposible para Tomás Mejías, que nada pudo hacer para evitar el primer tanto. Los pupilos de José Juan Romero, irreconocibles sobre el césped del Alfonso Murube, no terminaban de encontrar situaciones francas para un Rodri que apenas entró en juego. En el minuto 39, Adri Cuevas intentó igualar con un testarazo que se marchó desviado y, en las postrimerías del primer tiempo, Juanpa envió el balón alto tras una buena jugada personal.

En el segundo tiempo el Ceuta salió en tromba. Los ingresos al terreno de juego de Alberto Gil y Pablo García surtieron un efecto inmediato sobre el verde. En la primera tentativa, Pablo García recogió un rechace de De la Cruz tras un testarazo de Adri Cuevas y fusiló a De la Cruz para igualar. Nuevamente el revulsivo intentó su doblete con un disparo que atajó el guardameta sin apuros. La réplica llegó con un lanzamiento de Héctor Nespral que repelió con acierto Tomás Mejías.

A pesar de que el cuadro charro se replegó e intentó contener el aluvión ofensivo del Ceuta, los pupilos de José Juan Romero no encontraron oposición a sus oportunidades, salvo la de un inspirado De la Cruz, que evitó la remontada. Con todo, Raúl Beneit, en el primer balón que tocó, cabalgó por el carril central y ajustó un remate raso cruzado para silenciar a los 3.000 aficionados que se habían dado cita en el Alfonso Murube. En el tiempo añadido, el conjunto local pudo igualar, pero el testarazo de Fabrizio a la salida de un córner se marchó fuera y los tres puntos terminaron volando a Salamanca.