El técnico del CB Avenida, Roberto Íñiguez, señaló a pie de pista nada más terminar el encuentro en Lugo que «es la peor derrota de mi carrera, tanto como entrenador y como jugador. Las jugadoras al final estaban en estado de schok, con cero confianza jugando. No tiene nada que ver con estar empezando la temporada, sino con aceptar dónde juegas y asumir dónde estás. Para jugar en Avenida hay que tener otro carácter y actitud y hoy ha sido todo lo contrario».
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Ya en declaraciones facilitadas por el club, el vitoriano explicó que «la responsabilidad es mía. Un equipo que juega así en los últimos diez minutos el responsable es el entrenador. Algo pasa. Hay pánico. Tiramos solas y no tocamos el aro. Nadie mete. Como entrenador, que yo recuerde, es la peor derrota que yo siento y el peor partido que he dirigido en mi vida. Nunca he dirigido que ha metido dos puntos en el último cuarto de un partido y jugando con tanta desconfianza. Decimos cosas en los tiempos muertos y luego se olvidan... Hay cuatro reglas básicas para el partido y se olvidan... Jugar en Avenida es complicado y hay que tener un carácter especial. Ahora somos un equipo bastante normal. Sobre todo vulnerable. Nos pesa todo. Hay que seguir trabajando y yo no me voy a rendir».
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