Avenida agranda su leyenda y vuelve a estar en una final de la Copa de la Reina

María Pedrosa

Sábado, 22 de marzo 2025, 18:47

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Unas semifinales más, una opción más. El partido más esperado. El infierno del Príncipe Felipe. Todo. Era todo. Y todo se dio. A la perfección. Con un equipo que ha aprendido de sus errores, que se ha levantado, que vuelve a ser.

Los dos equipos comenzaron con tendencia similares. Puntos en segundas oportunidades tras rebote ofensivo y balones al interior, con sus pívots como máximas anotadoras. Sika, con cuatro de los seis puntos de equipo tuvo, sin embargo, que sentarse antes de lo previsto con dos faltas personales. Salió Fasoula y el equipo continuó anotando en pintura. Se veían a a perfección ella y Arica Carter, que en segundos en pista anotó y dio dos asistencias (13-14).

Ana rotó a todo su quinteto antes de cumplirse los primeros ocho minutos de juego, con falta de control del rebote defensivo de Perfumerías Avenida y un paso atrás en todos los tiros exteriores de su rival que, pese a reiterados fallos, acabó dando puntos a Zaragoza. Tampoco fallaba desde la línea de tiros libres el equipo maño, lanzando seis por ninguno de Avenida en el primer parcial (13-20).

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El segundo parcial comenzó con dos triples seguidos de Delaere, para un parcial de 8-2, con muchas pérdidas de balón por parte de ambos conjuntos, que pusieron a Avenida por delante de nuevo en el partido: 23-22. Y lo más difícil ya estaba hecho. Volver a ponerse por delante, remontar la máxima renta de siete puntos. Mientras tanto, en el duelo Hermosa-Fasoula, ganaba bailando la griega, aunque perdía en el rebote. Salió Laura Gil para cambiar la defensa. Y el partido se fue al descanso con un 30-31, con canasta de la murciana tras rebote ofensivo. El talón de aquiles de Avenida en el lado contrario de la cancha.

El doble de rebotes Zaragoza que Avenida, hasta siete en ataque, además de diez tiros libres, por tan solo dos de las charras. El partido estaba apretadísimo.

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El segundo tiempo se empezó ganando con canasta de Iyana en una acción individual maravillosa (32-31). Dos tiros en la misma posición de Laura anotados y el control del rebote, llegaron a poner arriba a Avenida por dos puntos, pero de nuevo llegaron dos faltas consecutivas de Sika, buscadas y encontradas, poniendo el encuentro en tablas. La máxima renta se alcanzó tras dos tiros libres de Andrea (42-38). Respuesta inmediata de Pueyo de tres y otro de Iyana, el encuentro estaba loco (45-41) y se iba a ganar en el rebote.

Zona de Avenida para lograrlo a falta de tres minutos para terminar el tercer cuarto que dio sus frutos con la renta más alta para Avenida de todo el partido (52-41). No veía aro Zaragoza y Avenida corría, corría mucho y con mucha confianza. El triple de Arica Carter hizo calló al Príncipe Felipe y una canasta de Fasoula dio alas (54-41). El parcial fue de 24-10.

En el último cuarto no terminó el parcial. Fue en aumento (4-0). Canasta de Arica, asistencia de la misma para que Jespersen rematara, obligando a Cantero a pedir tiempo muerto. Trasladado al otro bando, en un pequeño aunque esperanzador parcial de 0-5 a favor de las locales, que también se pasaron a la zona. Y también mismo resultado el parcial a favor de Zaragoza llegó al 0-9, recortando distancias sin prisa, pero sin pausa. 60-50, con canasta de Iyana Martín entre la tensión y cinco minutos por delante.

Tocaba sufrir con todo el pabellón en contra y Zaragoza en plan killer, pero hubo mucha paciencia, hubo aprendizaje, hubo todo lo que se necesitaba. Sobre todo, a Laura Gil, capaz de hacer trabajo silencioso y brillante al mismo tiempo, capaz de rebotear. Los 10 seguían de renta, pero un triple de Mané hizo temblar el partido. Sí, todavía más (68-61). Quedaba solo un minuto. Y lejos de cualquier final tranquilo... un fallo debajo del aro de Gil y otro desde el triple de Andrea, acompañados por uno a favor de Mariona tensaron el encuentro 68-64 con 19 segundos por delante.

Los tiros libres sí entraron. Avenida ganó. Avenida lo volvió a hacer. Avenida vuelve a una final. Vuelve a escribir su historia.