Pepe Mel sustituye a Garitano en el Almería

Forjado en su etapa de delantero en la prolífica cantera del Real Madrid, Pepe Mel tiene 61 años y esta misma temporada había dirigido sin éxito al OFI Creta griego. Al también escritor, con cinco novelas ya publicadas, le corresponde a corto plazo aprovechar el próximo parón de selecciones para cambiar la dinámica de un equipo que todavía no sabe lo que es ganar un partido este curso en Primera y se halla a 14 puntos de la zona de permanencia con solo 10 jornadas por delante.

El Almería será nada menos que el decimosexto club que entrene Mel en su extensa carrera. Tras foguearse en el Unión Zona Norte de Madrid y en el Coslada, dirigió luego al Mérida, Real Murcia, Tenerife, Getafe, Alavés, al Poli Ejido, Rayo Vallecano, Betis en un par de etapas, Deportivo de La Coruña, Las Palmas y al Málaga, último equipo español al que condujo durante el curso 2022-2023. Fuera del país, además de la aventura heena reciente destaca su paso por el West Bromwich Albion inglés en 2014.

Su nombramiento oficial se produce un día después de la destitución de Gaizka Garitano. El vasco aterrizó en el club andaluz para modificar la pésima trayectoria y al menos darle alguna victoria, pero 18 jornadas después se tuvo que marchar tras no haber conseguido los tres puntos de una tacada.

La única victoria que ha conseguido Garitano fue en Copa del Rey, ante el Talavera (0-2). Sin embargo, la ilusión entre jugadores y afición volvió a caer en picado tras ser eliminado en este torneo ante el modestísimo Barbastro. (1-0). El balance de Gaizka es de cero victorias, siete empates y 11 derrotas, demasiado pobre para poder soñar con seguir en la élite.

Días de cambios, ya que el martes también se formalizó la crisis en el Celta. Rafa Benítez era una apuesta a largo plazo, ya que tenía contrato hasta junio de 2026, pero fue fulminado como técnico del Celta a causa de los malos resultados que han llevado a los vigueses a estar solo dos puntos por encima del Cádiz en la lucha agónica permanencia. La goleada sufrida frente al Real Madrid en el Bernabéu (4-0) ha sido el detonante que llevado a la directiva a tomar la decisión de buscar un cambio de rumbo en el banquillo olívico.

Al menos hasta el final de temporada, su sustituto estaba en casa y se llama Claudio Giráldez. Hasta hoy era el entrenador del equipo filial, al que leva dos temporadas consecutivas clasificando en los puestod de honor de la Primera RFEF. Por tanto, el club gallego pasa de contar con un preparador curtido en mil batallas a apostar casi por un primerizo. Una apuesta de riesgo en un momento de incertidumbre.

«Rafa Benítez y su cuerpo técnico se desvinculan del Celta tras ocho meses de entrega absoluta y plena dedicación, pero en los que el equipo no ha obtenido los resultados esperados. El club quiere expresarle a Rafa Benítez y a sus ayudantes su más sincero agradecimiento por la implicación, honestidad y profesionalidad que mostraron desde su llegada y el incansable trabajo realizado. El Celta quiere además desearles mucha suerte y éxito en el futuro», comunicó la entidad Balaídos en la hora del adiós.

La presidenta del Celta, Marián Mouriño, siempre mantuvo la apuesta firme por el veterano y supercontrastado entrenador madrileño de 63 años. Sin embargo, la severa derrota sufrida en Madrid, con dos autogoles en los últimos minutos, ha precipitado todos los acontecimientos de una forma quizá inesperada.

La máxima mandataria del conjunto olívico siempre dijo que mantendría a Benítez hasta que la situación fuera insostenible y, visto lo visto, ha llegado a la conclusión de que el Celta precisa un cambio anímico y en la dinámica de resultados. A la caída en Chamartín, lógica de todo punto y con demasiado castigo para los méritos de blancos y celestes, se suma seguramente el hecho de que el Cádiz le ganó al Atlético en el Nuevo Mirandilla y se ha metido de lleno en la batalla.