Lewandowski y Benzema se disputan el Pichichi más barato del siglo

Desde el Mundial, Lewandowski ha bajado su rendimiento de manera alarmante. Solo cinco goles anotados en Liga este 2023, y sus estadísticas realizados han caído en picado. Comenzó la Liga promediando 1,08 goles por encuentro. Ahora, en los últimos 15 encuentros, esa media anotadora ha bajado hasta un 0,33. El polaco, acostumbrado a superar los 30 goles en la Bundesliga con relativa facilidad como ha demostrado en las últimas tres temporadas, vive un momento de sequía en un Barça abonado al 1-0 y al que le cuesta cerrar los partidos en el aspecto anotador.

Ante el Rayo Vallecano, el ariete culé consiguió anotar en el tramo final del encuentro tras recoger un rechace en el área, aunque su partido fue más bien discreto. Los datos confirman además que el polaco se siente más cómodo lejos del Camp Nou. Desde la gran cita de Catar, ha anotado 10 tantos con el Barça entre todas las competiciones. Nueve de esos goles los ha sellado fuera de casa, y solo uno en el Camp Nou ante el Cádiz en la jornada 22.

De seguir con este promedio, Lewandowski acabaría la competición liguera con una cifra cercana a los 21 goles, siendo la más baja desde la temporada 2001-2002, cuando Diego Tristán anotó esa misma cantidad con el Deportivo para adjudicarse el Pichichi. Para ver una cifra inferior reciente habría que remontarse a la temporada 1990-1991, cuando Emilio Butragueño anotó 19 goles con el Real Madrid. Sin embargo, el Pichichi con la cifra más baja de la historia es Guillermo Gorostiza, delantero del Athletic Club en la temporada 1931-1932, que fue el máximo goleador de Primera anotando solo 12 dianas, aunque en aquella época había menos equipos y por consiguiente, se jugaban menos encuentros.

Messi y Cristiano monopolizaron la tabla de máximos goleadores de la Liga durante más de una década. Sin ellos, la Liga se ha quedado huérfana' de arietes que superen la barrera de los 30 goles. Solo Luis Suárez en la temporada 2015-2016 fue capaz de romper esa hegemonía del argentino y del portugués, anotando nada más y nada menos que 40 tantos. Una cifra extraordinaria para el uruguayo, pero que Messi y Cristiano acostumbraban a realizar sin despeinarse. De hecho, el rosarino tiene el récord de más goles anotados en una temporada en la Liga, con 50.

La temporada pasada, ya sin Messi, Benzema fue el máximo goleador con 25 tantos. Este curso, las matemáticas hacen presagiar que la cifra será similar o incluso menor. Sorprende además que jugadores como Enes Ünal o Joselu, que juegan en equipos que tienen la salvación como objetivo primordial, se encuentren entre los máximos goleadores de la competición.

Los discretos registros de Lewandowski y Benzema contrastan con el resto de rematadores de las grandes ligas europeas. Haaland es un caso aparte. El ariete noruego suma 33 goles y va camino de romper todos los récords goleadores en la competición inglesa. En su punta de mira está Andrew Cole, delantero del Newcastle que anotó 34 goles en la temporada 1993-1994. Cabe destacar que Ivan Toney, tercer máximo artillero de la Premier, lleva 19 goles, uno más que el pichichi de la Liga.

En la Ligue 1, Kylian Mbappé suma 22 dianas, mientras que Jonathan David (21) y Alexander Lacazette (20) le siguen de cerca. También se ven superados por la Serie A, donde Víctor Osimhen acumula 21 goles con el Nápoles. La falta de arietes con pegada retrata a la Liga en el Viejo Continente. En el caso del polaco, por primera vez en su carrera se está haciendo habitual que no marque. En Vallecas su equipo cayó, pero el de Varsovia cambió la dinámica.