La jueza ordena paralizar las obras del parking del Bernabéu

Nuevo revés para el Real Madrid aunque no en el plano deportivo. Si hace casi dos semanas el club presidido por Florentino Pérez tuvo que cancelar los conciertos previstos en su estadio hasta la próxima primavera por la falta de medidas que aislaran del ruido que llevaba meses causando problemas a los vecinos, ahora la jueza ha decidido paralizar las obras en los aparcamientos de los aledaños del Santiago Bernabéu que fueron autorizadas por el Ayuntamiento el 9 de marzo de 2023.

En concreto, el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 30 de Madrid, el mismo que el pasado mayo anuló el contrato para la construcción de dos parkings subterráneos unidos por un túnel junto al Bernabéu, ha ordenado ahora parar de inmediato las obras. En un auto fechado este miércoles, la magistrada Carmen Casado Guijarro da la razón nuevamente a la Asociación Vecinal de Perjudicados por el Bernabéu (AVPB) e insta al Ayuntamiento de Madrid a adoptar «las medidas necesarias para hacer efectiva su paralización».

En el escrito, el tribunal argumenta que el recurso de apelación presentado ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid por el consistorio y el club no exime de «la obligación de paralizar unas obras cuya autorización administrativa ha sido anulada». Y añade que el Real madrid «actualmente carece de título que habilite su ejecución».

La jueza considera que, continuando con los trabajos, ambas entidades están «obviando la consecuencia natural que se desprende de la anulación» dictaminada y asumiendo con ello «el riesgo que para los costes de ejecución» supone si finalmente las obras no pudiesen llevarse a término porque la sentencia se convierta en firme. En caso contrario, expone el escrito, parar las obras también es la opción adecuada, pues retomarlas no supondría un coste añadido. El Real Madrid y al Ayuntamiento disponen de un plazo de 10 días para ejecutar la sentencia, que podrá ser recurrida en otros 15 días hábiles.

Las movilizaciones en contra de este parking comenzaron hace siete años, cuando los vecinos comprobaron que, además de padecer los efectos causados por la construcción del nuevo coliseo merengue, las obras iban a llevar consigo importantes reformas también en los alrededores. Tras la primera sentencia favorable de mayo, los mismos vecinos protestaron por los ruidos que emanaban del estadio. Se quejaban de que «el Santiago Bernabéu había pasado de ser campo de fútbol a un 'eventódromo' en el que vez a la semana se disputaban partidos».

Según el fallo de primera instancia, el Ayuntamiento de Madrid impidió a los ciudadanos «conocer el verdadero alcance del proyecto y formular alegaciones». Además, hizo caso omiso a los informes técnicos elaborados por los informes de los funcionarios municipales en los que se indicaba que los aparcamientos eran incompatibles con el plan de ordenación urbana vigente.

La sentencia condenaba al Ayuntamiento a pagar las costas y aseguraba que las obras de este macroparking no tenían ningún interés público y que tan solo benefician al único concesionario del mismo, el Real Madrid. Y advertía del perjuicio por la supresión de más de cien árboles y zonas verdes, así como de la saturación de tráfico y contaminación que iba a provocar.

El proyecto que el tribunal ha ordenado paralizar contemplaba crear 1.846 plazas de aparcamiento distribuidas en cuatro plantas. El valor estimado del contrato ronda los 562 millones de euros y, según el plan de negocio presentado por el Real Madrid, el club blanco debía invertir alrededor de 100 millones para las obras y preveía ingresar más de 470 millones en estas cuatro décadas por la explotación. En total, 326 millones de euros de beneficios para el club gobernado por Florentino Pérez.

Cabe recordar que, recientemente, el Real Madrid anunció que suspendía los conciertos en el Bernabéu hasta que solucionara los problemas de acústica tras las denuncias de los vecinos, que llevaban meses aguantando ruidos por encima de lo permitido durante todo el día ya que los artistas no solo actúan en los concierto sino que prueban el sonido unas horas antes. Artistas como Dellafuente, Aitana, Lola Índigo y el grupo de K-pop coreano Music Bank se quedaban sin lucar para celebrar sus macroconciertos con todas las entradas vendidas.

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