El estadio Helmántico, la 'abandonada' tercera catedral de Salamanca

En diciembre del 68 el club obtuvo una opción de compra sobre los terrenos del Prado Panaderos en el término municipal de Villares de la Reina, que se materializó después por un precio de 6.652.979 pesetas (unos 40.000 euros actuales). En un reunión posterior de la junta directiva surgió el nombre de Helmántico, que obtuvo el consenso general. En el 69 se iniciaron las obras y el campo fue inaugurado el 8 de abril de 1970 con un partido ante el Sporting de Lisboa. El mítico Juan Antonio Samaranch, delegado nacional de Deporte por entonces y luego presidente del COE, lo inauguró bajo el mandado del presidente Augusto Pimenta. El partido inaugural fue ante el y el Sporting Clube de Portugal (0-0). Hubo que esperar hasta el 26 de abril para ver el primero gol oficial, de Calero, al Real Valladolid.

Desde entonces hasta su desaparición, la UDS jugó sus encuentros en el Helmántico campo que sufrió varias remodelaciones en su interior e incidentes.

Así, en 1975 un vendaval se llevó la cubierta del fondo norte; en el 78 otras fuertes rachas de viento también dieron al traste con otra parte de la cubierta. Tras un nuevo incidente en el 79, se decide ampliar la grada de Preferencia (la más alta de todo el graderío). Hasta la campaña 82-83 no tuvo las torres de iluminación que luego le han seguido acompañando hasta hoy. Los grandes videomarcadores no llegaron hasta finales de los 90. El último partido de la UD Salamanca en el Helmántico llegó el 19 de mayo de 2013 contra el CD Tenerife.

Pero tras la disolución de la UD Salamanca, la empresa Desarrollos Empresariales Deportivos SL, controlada por el actual presidente del Salamanca CF UDS -club creado en 2013- el mexicano Manuel Lovato y el empresario Víctor Iglesias Alonso, compraron el Helmántico por poco más de un millón de euros.

El mexicano, dentro de sus constantes promesas incumplidas estos últimos años, ha sido incapaz de cuidar el Helmántico. Llegó a anunciar una ciudad deportiva, videomarcadores nuevos, una remodelación del campo... pero todo ha quedado en nada y el Helmántico presenta en la actualidad un estado de abandono total tanto por fuera como por dentro, un estadio al que se le ven las costuras cada domingo con las losetas que recubren los pilares de la zona de las oficinas en el suelo, las gradas dejadas a su suerte, con asientos sucios y las cabinas de la prensa con goteras y llenas de polvo. El mal estado es tal que hasta aficionados del actual Salamanca UDS lo denuncian a través de sus redes sociales al término de los partidos.

De hecho, desde hace varias temporadas el club solo utiliza para sus seguidores el Fondo Sur y la Tribuna principal, quedando el Fondo Norte y la Preferencia sin poder ser utilizadas.