El CD Guijuelo roza la heroica ante el Villarreal pero se queda sin premio en la prórroga

Mario Sánchez formó finalmente con defensa de cuatro, con Davo, Trapero, Aizpiri y Coque en el lateral izquierdo; en punta, como suele ser habitual, Toti. Enfrente, un Villarreal de Quique Setién que jugó con siete titulares pero también metió a hombres que no tienen tantos minutos con el ''submarino amarillo'', caso de Mandi, de Baena y de Trigueros.

En el estadio Municipal el ambientazo era absoluto, de partido especial, de noche típica de Copa para un equipo pequeño que quiere sorprender a un gigante campeón de la Europa Liga en 2021 como es el Villarreal. En el palco, ex del Guijuelo que tampoco se quisieron perder el partido, como el exentrenador, Ángel Sánchez, el exdirector deportivo, Ángel Marcos, y también el alcalde de la villa chacinera, Roberto Martín.

El partido de Copa tuvo un claro guion en el primer tiempo. Garban tuvo la primera para el conjunto chacinero después de una buena jugada local que obligó a Pepe Reina a despejar de puños para mandar el balón a córner. La posesión era del conjunto de Setién, que buscaba permanentemente la espalda a los centrales del Guijuelo, más lentos en las arrancadas. El césped, lentísimo y pesado, impedía hacer demasiadas florituras en el terreno de juego.

En el minuto 7 el Guijuelo tuvo otra con una falta directa que botó Cristóbal Gil y que no encontró rematador en el área defendida por Pepe Reina, aunque el balón se paseó con peligro. La posesión, en un monólogo constante del conjunto castellonense, era del Villarreal pero sin apenas pisar área en el Municipal.

Recordaba el submarino a la selección española en el Mundial. Mucho balón, mucho dormir el partido, y nulos acercamientos al área en los primeros minutos del partido. Y eso no lo iba a desaprovechar un conjunto especialista en su casa, donde solo ha encajado un gol en todo lo que va de temporada. En el minuto 13 de partido llegó el insólito 1-0 para el Guijuelo, para alegría de los 1.700 aficionados presentes en Luis Ramos. Pepe Carmona, profeta en su partido 150 de su historia con el Guijuelo, remató solo ante Pepe Reina en un fallo garrafal de la defensa del Villarreal. Ganó la marca a los centrales, tiraron mal el fuera de juego, y con la puntera introdujo el balón en la portería del campeón del mundo. 1-0, monólogo del Villarreal... pero ni profundidad ni pólvora salvo los desbordes por la banda derecha de Samu, que generaba algo de peligro.

Lo siguió intentando el Guijuelo. Willy tuvo un remate de cabeza en el minuto 18 a la salida de un córner, pero la mandó fuera. El partido cayó en un juego tedioso de los visitantes, que solo tenían chispazos sobre el arco defendido por Roberto. Los amarillos tuvieron una falta directa botada en el minuto 28. Baena mandó el balón por el lateral de la red, cerquísima de la meta defendida por el arquero salmantino.

El Villarreal reaccionó al 1-0 con más verticalidad a partir del minuto 30 de partido. No le duraba nada la pelota al equipo de Mario Sánchez, pero tampoco era el guion del partido. Los de Setién tenían tiempo para revertir el 1-0 en contra, y jugaban con toda la calma del mundo ganando metros al conjunto chacinero, pero siempre jugando entre líneas con Samu, fundamentalmente, por banda diestra. Era un quiero y no puedo de los castellonenses salpicado de chispazos locales.

En el minuto 33, un centro y una jugada de Caramelo que de nuevo se paseó por el área visitante, puesto que Femenía la mandó a córner con mucho peligro, puso más pimienta al duelo. Contestó Pau Torres con un balón que mandó alto un disparo lejano. Todo seguía su curso hasta que en el minuto 40 el árbitro Pizarro Gómez decretó pena máxima a favor del Villarreal por un penalti, o ''penaltito'' muy discutido, cometido por Alberto Trapero en el forcejeo con Gerard. El propio Gerard lanzó el penalti... y lo transformó para igualar el partido.

La última de la primera parte fue para el Guijuelo por mediación de Caramelo, que disparó desde fuera del área a las manos de Pepe Reina. El colegiado, Pizarro Gómez, recibió una merecida pitada por parte de la grada chacinera al cortar, inexplicablemente, un ataque prometedor del Guijuelo cuando bordeaba la corona del área. Empate en el descanso y todo abierto para el segundo tiempo.

La segunda parte comenzó con el mismo guion que terminó la primera. Un Villarreal con el balón e intentando sorprender en velocidad al Guijuelo, que se defendía como podía. De hecho, Yeremi Pino tuvo un mano a mano ante Roberto en el 48 tras un pase espectacular desde su propio campo de la defensa visitante. El jugador la mandó fuera por poco, por unos centímetros, y casi significa el 1-2.

No fue así, y todo siguió igual en los primeros diez minutos de partido. Caramelo se sacó un disparo tras recorte peligroso que se fue a las manos de Reina después de dos imprecisiones del mundialista, algo dubitativo en algunas acciones.

En el 63 Garban chutó a puerta tras una posible falta cometida sobre Montero y que el árbitro del partito obvió de nuevo, ante el enfado de la grada local. Avanzaban los minutos y Mario Sánchez y Setién movieron el banquillo, con la entrada del delantero Montero en sustitución de Caramelo para buscar altura y arrastrar a los centrales.

El partido abordaba el minuto 70 con todo igual. Lo intentó Mojica para los visitantes pero se encontró con Roberto. Coquelin la tuvo con una volea que se fue fuera directamente, sin demasiada fe.

Al filo del 90 el Guijuelo tuvo una falta peligrosa. La puso Álex Lorenzo desde el costado izquierdo y la sacó como pudo el Villarreal. Pocas ocasiones hubo en el partido en el Municipal en la segunda parte y, en todo caso, fue el equipo charro el que puso las más peligrosas. Tremenda heroicidad salmantina, aferrándose desde la defensa a forzar la prórroga en el Municipal. El resultado era totalmente justo, aunque el Guijuelo llegó mucho menos al área de Reina respecto a la primera mitad. Pero el guion era el mismo continuamente... hasta el segundo minuto de la prórroga.

Un pase de Parejo a la espalda de la defensa chacinera pilló por sorpresa a Trapero, que se adelantó con un disparo cruzado sobre la portería de Roberto y que supuso el 1-2. Ahora el Guijuelo sí estaba obligado a aprovechar cualquier ocasión que tuviera, aunque el cansancio ya pesaba en las botas de los jugadores salmantinos.

A falta de ocasiones, el partido se fue calentando conforme pasaban los minutos. Y muestra de ello fue una falta excesivamente dura de Álex Lorenzo en el centro del campo sobre un jugador del Villarreal que tuvo, quizá, también excesivo por la roja directa que recibió del árbitro. En medio de un amago de tangana, Trapero también recibió su castigo con una amarilla.

Y poca historia más tuvo la prórroga. Balones largos de un Guijuelo que quería presionar en el centro del campo para robar balones pero la calidad visitante ahora sí se imponía claramente a un Guijuelo casi entregado al resultado después de su gran partido. El Villarreal tuvo varias oportunidades para matar el partido a la contra y poner el 1-3 definitivo, pero el choque concluyó, entre quejas hacia el colegiado por su actuación durante el partido, con el 1-2 final. Honor y mérito absoluto para los chacineros que, como ya pasara contra el Rayo Vallecano el año pasado, casi elimina a un Primera División.