St. Pedro pasa a la final tras ser el favorito de la segunda eliminatoria del Benidorm Fest

Una gala, todo hay que decirlo, más variada y en cuanto a estilos que la del martes y en la que el canario St. Pedro consiguió convertirse en el favorito de una noche en el que las propuestas eurovisivas fueron menos que en la primera semifinal pero en la que se alternó el pop, con el flamenco y los boleros. Y fue esta precisamente la apuesta que más gustó de la noche. 'Dos extraños (cuarteto de cuerda)' irrumpió en el ecuador del festival como si un ángel hubiera pasado. Un bolero de desamor, elegante y sobrio, con una letra llena de nostalgia y puro sentimiento que sí consiguió conquistar el amor del jurado y del voto demoscópico, que le otorgaron la máxima puntuación tras llevar al escenario la apuesta más personal y distinta de la edición.

Lo que dejó claro la segunda semifinal es que España podría repetir la apuesta por el flamenco para el certamen europeo, como ya ocurrió el pasado año con Blanca Paloma. Partía como una de las favoritas de la segunda semifinal y consiguió colarse entre las cuatro más votadas. María Peláe, con una actuación fina de flamenco con influencias de rock y electrónica inspirado en 'La desbandá', uno de los episodios más desconocidos de la Guerra Civil, y con mención directa a las 13 Rosas, consiguió atrapar con 'Remitente' a jurado, voto demoscópico y público, que le otorgaron un total de 131 puntos. Un inicio de gala puramente reivindicativo que se llevó la ovación del público tras una puesta en escena arriesgada como si de un cementerio se tratase y en la que sus cuatro bailarines, tan solo con calzoncillos, recrearon un fusilamiento.

Pero fue sin duda Jorge González quien subió la temperatura de una gala poco festivalera y que cerró, como artista invitado, el joven Álvaro Quintero. Y es que 'Caliente' prometía y cumplió. El arte gitano llegó a Benidorm pisando fuerte con una actuación con la que el público se entregó. La defensa fue firme no solo durante la interpretación sino también en el momento de la votación. Jurado y público no opinaron lo mismo de una actuación muy sensual y con ligeros recuerdos a Chanel. Mientras que el primero tan solo le dio 42 puntos -la tercera peor posición-, el voto de los espectadores lo aupó finalmente hasta la segunda posición. Un momento de tensión en la que la presentadora Ruth Lorenzo tuvo que interrumpir el programa y pedir respeto para el jurado.  

Lo cierto es que a la noche, en cuanto a ritmo, le costó arrancar. Aunque era el objetivo de Dellacruz, que actuó en segunda posición, este tan solo consiguió la unanimidad de jurado, voto demoscópico y público. Fue el menos votado de una semifinal en la que el canario pretendió llevar a Eurovisión un electrizante pop urbano con toques latinos.

Algo parecido le ocurrió a Marlena. Con una apuesta eurovisiva y con una letra pegadiza, el dúo no consiguió que este fuera su 'Amor de verano'. La segunda parte de la canción fue la única con la que consiguieron despertar a un público que había entrado poco en calor a la altura de la tercera actuación. Aún así, el cierre, de la mano de Almácor, sí fue por todo lo alto. 'Brillos platino', que volverá a subirse al escenario del Fest el sábado, puso el broche de oro con una enérgica actuación a unas semifinales en las que la apuesta en catalán -Roger Padrós y su 'El temps'- y el pop clásico se quedaron a las puertas de pasar a la final.

Yoly Saa, Roger Padrós, Marlena y Dellacruz quedan fuera, junto a Lérica, Quique Niza, Mantra y Noan, de la carrera por conseguir el próximo sábado el tan ansiado micrófono de bronce que da el billete directo a Eurovisión 2024. Serán Nebulossa, Angy Fernández, Sofía Coll, Miss Caffeina, St Pedro, María Pelae, Jorge González y Almácor quienes luchen este sábado por coger el relevo de Blanca Paloma y convertirse en el representante de España en el festival europeo.