Antonio Banderas
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Antonio Banderas
Germán Jiménez
Domingo, 9 de junio 2024, 00:54
Antonio Banderas (Málaga, 10 de agosto de 1960) está de estreno. Uno de los actores españoles más internacionales, el que a principios de los noventa puso una pica en Hollywood tras haberse hecho un nombre ya en España de la mano de Pedro Almodóvar, ha recibido ya los primeros aplausos por 'Tocando nuestra canción', el tercer musical (tras 'A Chorus Line' y 'Company') como director del malagueño, que se apoya en un chispeante libreto, una lúcida puesta en escena y el protagonismo de María Adamuz y Miquel Fernández para instalar en el Teatro del Soho Caixabank de Málaga el Broadway más divertido y sofisticado. Perfeccionista donde los haya, el actor, gestor y promotor cultural reconoce que, en estos tiempos de lo inmediato, de lo efímero, la clave del éxito está en el esfuerzo y la perseverancia.
- Han pasado ya más de tres décadas desde que inició su andadura internacional, desde que cruzó el charco. ¿La España que se ha encontrado ahora es muy diferente a la que dejó?
- La España que yo dejé estaba mudando su piel y cambiando de color. Salía del blanco y negro, para dar paso a toda una gama de colores, los de la movida de los 90. El país despertó a una nueva realidad en todos los ámbitos: política, social, educativa, cultural… Esas tres décadas cambiaron completamente la fisonomía de nuestro país. Una parte importante de esos cambios yo los viví desde otro continente y al no estar aquí, los iba descubriendo cada vez que regresaba. Ahora sí vivo en España, aunque viaje constantemente, y por tanto estoy inmerso en el día a día y formo parte también de la ciudadanía que provoca y padece esos cambios. Algunos a mejor y otros no tanto… Pero, indudablemente, es una España muy diferente a la que yo dejé.
- ¿Qué le diría a los jóvenes cuyos referentes aspiracionales muchas veces están en plataformas de contenidos virales?
- Que lograr el éxito o alcanzar los sueños que se persiguen no se logra desde lo efímero o lo superficial. Hay que trabajar muy duro y focalizar la atención en aquello que uno quiere lograr. Es peligroso educar a los jóvenes en la cultura de lo inmediato porque todo se consigue con esfuerzo y perseverancia. Hay que dedicar tiempo a las cosas, profundizar en el aprendizaje y ser conscientes y constante, en aras del trabajo bien hecho. Esa es mi máxima, sino hago las cosas buscando la excelencia, prefiero no hacerlas. El Teatro del Soho Caixabank, mi proyecto más vital, es exactamente eso, la búsqueda del éxito a través de la excelencia.
- Tras una veintena de películas, en 1992 le llegó el reconocimiento internacional con 'Los reyes del Mambo', su primer papel en habla inglesa. Luego llegaron grandes éxitos como 'Philadelphia', 'Entrevista con el vampiro', 'Desperado', 'El Zorro'... De ahí a gestor cultural en su Málaga natal. ¿Qué espera del ambicioso proyecto Sohrlin Andalucía con el que está tan profundamente implicado?
- Es un proyecto que se está gestando y que creo va a ser un antes y un después para la oferta cultural de Málaga, de Andalucía y de España. Domingo Merlín, un profesional muy reconocido en el ámbito de los grandes espectáculos, es mi otra mitad en esta aventura que pretende recuperar el singular espacio de una antigua fábrica delante del mediterráneo. La idea es dedicarlo a la creación, producción, entrenamiento, formación, exhibición y distribución de las artes escénicas y el entretenimiento cultural con proyección internacional. Es muy ambicioso ya que será motor de la industria del entretenimiento y, a la vez, cantera al formar a los jóvenes en los oficios de las artes escénicas y visuales.
- ¿Cree que promocionamos lo suficiente a nivel internacional nuestro patrimonio o la diversidad y riqueza de nuestra identidad?
- Desde mi ámbito de trabajo siempre tengo presente la dimensión internacional de mis proyectos. Tanto El Teatro del Soho Caixabank o el Espacio Sohrlin, son un ejemplo de ese interés por promocionar la cultura y el patrimonio español, más allá de nuestras fronteras. La riqueza y variedad de nuestra cultura es un ejemplo de todo lo que es España puede aportar al mundo desde todos los ámbitos: cultura, deporte, ciencia, gastronomía….
- Ha recorrido todo el planeta por tu profesión y, también, como viajero insaciable. Desde su punto de vista, ¿qué valores diferenciales cree que tiene España en un mundo cada vez más globalizado?
- La globalidad es una realidad, pero creo que un país con tanta personalidad como el nuestro sigue manteniendo su idiosincrasia y eso es precisamente lo que lo hace más atractivo para el viajero. Aquí van a encontrar paisajes increíbles, unas infraestructuras muy preparadas para recibir turistas, una gastronomía variada y riquísima; y una huella cultural fruto de una historia extraordinaria y de la fusión de fenicios, romanos, visigodos, árabes, judíos…. Y, lo más importante, es que la gente que recibe al extranjero con los brazos abiertos.
- Pero, en concreto, ¿qué cree que nos hace tan atractivos para ese público americano que tan bien conoce?
- Sin duda, nuestra historia y cultura. Desde el Museo del Prado, que tiene la mayor concentración de arte de primerísimo nivel por metro cuadrado, a las catedrales repartidas por toda nuestra geografía. Pero, también, una gastronomía imbatible y una oferta vinícola interminable. Y ahora, como nunca antes, una cartelera de espectáculos musicales que han llevado a Madrid a convertirse en la tercera capital de musicales del mundo…
- Hasta hace poco el foco estaba puesto en traer los grandes musicales de Broadway. Hoy, con iniciativas como el Teatro Soho Caixabank de Málaga, el objetivo es que el público americano venga a ver las producciones que hacemos aquí. ¿Cuál es la fórmula del éxito para atraer una audiencia tan experta en grandes producciones teatrales?
- Madrid ha recibido una avalancha de producciones musicales con los grandes clásicos de Broadway y otros nuevos libretos. Todos ellos han convivido y han creado una oferta increíble para el público. Nuestra propuesta desde el Teatro Soho Caixabank ha sido apostar por recuperar algunos de los musicales más reconocidos de la historia como es el caso de 'A Chorus Line' o 'Company'. Siempre buscamos proyectos que sean icónicos.
- Esta semana acaba de estrenar 'Tocando nuestra canción'. ¿Qué le ha llevado a elegir este libreto?
- Es una apuesta por mirar las relaciones de pareja en clave de comedia, pero los personajes de la historia, poco a poco, revelan sus pequeñas tragedias, sus fobias, sus deseos y el uso que estos hacen del humor como mecanismo de defensa. Neil Simon, Marvin Hamlisch y Carole B. Sager, libretista, compositor y letrista respectivamente, nos proponen una narrativa cargada de dulce ironía, e inteligencia a través de la cual vamos desmembrando la personalidad de dos seres humanos. Un hombre y una mujer, que viajan por su existencia con los bolsillos llenos de amor y desamor, dispuestos a enfrentarse a sus poderosos miedos, desdoblándose y multiplicándose para sugerir que, quizás, todos nosotros somos diferentes posibilidades frente a diversos caminos y opciones. Es un homenaje, un tributo, a una forma de contar historias que invadió las pantallas de cine y nuestros corazones durante las décadas de la comedia romántica norteamericana.
- Y en octubre estrenará 'Gypsy', otra gran apuesta por uno de las obras más laureadas en los premios Tony...
- Sí, queremos estrenar, probablemente, en otoño. 'Gypsy' estará protagonizado por Marta Ribera, con dirección musical de Arturo Díez Boscovich. El espectáculo contará con la mayoría de las coreografías originales de Jerome Robbins, uno de los grandes coreógrafos y directores de la historia de musicales como 'West Side Story' o 'El violinista en el tejado'. Es uno de los mejores musicales estadounidenses de todos los tiempos y está basado en las memorias de la artista y vedete Gypsy Rose.
- El próximo día 12 de junio recibirá en Madrid el Turium Connecting Excellence Award por su labor como embajador de la cultura y la excelencia de nuestro país más allá de nuestras fronteras. Después de una vida consagrada a las artes, ¿cree que subestimamos el poder de la creatividad como catalizador de cambio y generador de riqueza?
- Sí, siempre se ha asociado la creatividad con nociones menos economicistas y se consideraba todo lo que tenía que ver con ella como algo que pertenece al entretenimiento, más que a la ciencia o a los negocios. Pero está claro que, sin creatividad, empezando por el propio invento de la rueda, el mundo no habría evolucionado. En esta era digital que habitamos, ahora más que nunca, es la capacidad de ser creativos lo que marca la diferencia entre las máquinas y el hombre. Es el motor real del cambio, aplicado ahora sí, a todos los órdenes de la vida.
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